Llegó el día. Hoy todos podemos ver Rocketman y les sugiero que no se pierdan ni un instante de este musical, biopic, de la vida de uno de los más grandes músicos que tenemos aún entre nosotros. Sin revelar demás, debo decirles que, aunque yo pensaba que me sabía muy bien la historia de Elton John, sigo maravillada con mucho de lo que cuenta y la forma en la que su eterna búsqueda de amor ha devenido en muchas de las mejores canciones del siglo pasado (y unas cuantas de éste).
¿Qué tan relevante es la orientación sexual de Elton para contar esta historia? Pues tal vez jamás lo había visto así, porque a mí nunca me causó más que placer cualquier manifestación artística o creativa que partiera de ello. Pero ahora me queda muy claro por qué esta cinta será más que relevante para la comunidad LGBT+ , sin dejar de lado a quienes no pertenecemos a ella. Como la carrera del mismo Elton. Y como el mismo Taron Egerton, que se convierte en este ídolo musical en todos los sentidos, nos los dijo en Los Ángeles hace algunas semanas.
“Soy un actor heterosexual interpretando a un ícono gay, así que sentí una enorme responsabilidad de honrar eso. Hay toda una comunidad que en cierta forma siente cierta pertenencia a ello, y es algo que debo hacer muy bien. Ha sido fantástico”.
Ya sé que ya les he hablado del soundtrack, pero entre más lo escucho más impactada quedo de que no es el verdadero Elton cantando. Taron es enorme. Con razón el músico, y su marido (y productor de la película) David Furnish, lo aman tanto. “Ya que es un musical, siempre fue un requisito. Pero para mí, se trató de cantar las canciones lo mejor que podía. Tuvimos suerte, de hecho, porque Elton y David estuvieron siempre muy cerca del proyecto”, dijo el protagonista.
Hay demasiadas capas, demasiados momentos en los que seguimos la vida emocional del Rocketman, y los que lo hemos tenido con nosotros por siempre nos descubrimos emocionados sabiendo que muchas de sus canciones, (como diría en una de ellas, aunque no está en la película) “Salvaron nuestra vida” alguna noche, lo mismo hicieron por él. Es emocionante, igual que la idea de Taron y Elton, grandes amigos, trabajando en lo que es ahora es una de mis películas musicales favoritas. “Descubro que, aunque tengo esta fachada aparentemente juvenil, me identifico más con el Elton mayor que interpreto. Porque todo el tiempo que he podido convivir con él ha sido con el Elton de ahora. Hay pietaje, claro, de cuando tenía 21 años, pero la gente suele presentar una versión particular de ellos mismos cuando están frente a la cámara”.
¡Que alguien me explique!
¿Por qué tantos rompimos en llanto cuando apareció George Lucas para la apertura de Star Wars Galaxy’s Edge en Disneylandia? Me encantaría saber qué sentía Lucas al haber hecho, literalmente realidad su visión que ya había dejado ir.
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