Transcribo las opiniones de tres medio ambientalistas, a raíz de mi artículo publicado ayer, sobre la pobre calidad del aire en Torreón.
Medio ambientalista 1 (MA 1): “Tu sugerencia de armar una propuesta ciudadanizada sistémica y sustentable para gestionar una mejor calidad del aire en Torreón es loable, pero Felipe Vallejo, director de la Dirección de Medio Ambiente municipal, abomina la participación ciudadana en este tema”.
MA2: “Imagínate, 5 compañeros nuestros renunciaron al Consejo Municipal de Medio Ambiente porque Vallejo lo utilizaba sólo para informar de su trabajo sin aceptar retroalimentación en temas tan delicados como ‘la falta de una red confiable de calidad del aire para disminuir los riesgos a la salud, (la ausencia de) un programa ‘creíble’ de verificación vehicular y de reciclaje, (el poco) refuerzo a la disposición correcta del escombro y (la mínima) vigilancia del mal uso de residuos potencialmente peligrosos en la industria’. Y Zermeño condona la actitud de Vallejo”.
MA3: “Respecto a la medición de la calidad de nuestro aire, estamos para el gato. Todas las ciudades de mas de 500 mil habitantes deben tener una red de monitoreo que reporte en tiempo real los 7 contaminantes criterio.
Torreón sólo tiene 3 estaciones que reportan un contaminante criterio: las partículas suspendidas menores a 10 micras.
No lo hacen en tiempo real, sino con una semana de retraso. Y sus reportes en tuiter están para llorar”.
MA 1: “La persona responsable de realizar esos reportes es un licenciado en Negocios Gastronómicos de la UVM con maestría en Tratamiento de Residuos del IPN.
Él estudia un doctorado en la UAAAN con beca de Conacyt y trabaja de tiempo completo en el municipio; aunque Conacyt no le permite que tenga otra actividad pagada a menos que sean 12 horas semanales o menos”.
MA3: “En conclusión: el monitoreo de la calidad del aire en Torreón es un desastre, nunca ha tenido el equipo o el personal que la atienda y reporte, y mucho menos, la voluntad política de los alcaldes para ello”.
