Los restos humanos encontrados ayer en tres hieleras, que fueron abandonadas cerca de los penales de Apodaca y Topo Chico, así como de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), pertenecían a una persona que tenía antecendentes penales.
De acuerdo con Esteban Cantú Montes, titular de la AEI, el sistema biométrico y dactilar estableció que los restos humanos pertenecían a una persona que fue liberada en 2014.
"Lo que les puedo decir es que la información hasta el momento es que pertenecían a una misma persona, no está identificado oficialmente; sin embargo, por el sistema de huellas con el que cuenta la Fiscalía General de Justicia es una persona que cuenta con antecedentes penales.
"Gracias a esta investigación se encontró que tuvo una detención en el 2009, otorgándole su libertad en el 2014, estando recluido por pertenecer a un grupo delictivo", dijo Cantú Montes.
El director de la AEI señaló que continuarán las indagatorias en relación a estos hechos y a los otros restos encontrados hoy afuera de la iglesia Santa María Goretti, en la colonia Industrial.
"Se encontró una cabeza humana con un narcomensaje como comúnmente se denomina, alusivo a las ventas de drogas; continuamos con lo mismo: la disputa entre cárteles por controlar el territorio”, comentó.
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