Ya pasó la comedera de tamales y el asado del Super Bowl, así que ya no hay pretexto para empezar esa dieta que te propusiste a inicios de año o el hacer ejercicio. Pero si eres de aquellos a los que les cuesta seguir sus propósitos de Año Nuevo y ya hasta los olvidaste, no te preocupes; le pedimos a Valeria Lozano, coach de hábitos profesional, que nos diera cinco tips para volver a retomar esos objetivos y los conviertas en un estilo de vida.
Lo más importante, como señaló Valeria, es tranformar esos propósitos que te hiciste la noche del 31 de diciembre en un hábito para que se quede en tu vida “y puedas disfrutar los beneficios a largo plazo”.
Estos tips te ayudarán a lograr tus objetivos de manera sencilla y verás como pronto, serán parte de tu día a día.
Tal vez ese vaso de jugo verde por las mañanas no es lo más delicioso del mundo, pero son sus beneficios por los que debes seguir tomando. Valeria asegura que al recopilar información sobre lo que traerá beber ese vaso de jugo o hacer ejercicio o el simple hecho de tomar más agua durante el día, te hará más consciente y podrás reforzar el comportamiento.
Si no te gustan las ensaladas con kale pero estás empeñado a bajar de peso comiendo sólo eso, entonces nunca lo lograrás. Valeria comentó que hacer propósitos que no son disfrutables son difíciles de mantener y buscarás en cualquier momento la excusa para dejarlo.
Por ejemplo, si te propusiste hacer ejercicio pero te choca salir a correr o hacer pesas, encuentra una actividad que te guste y que te haga tener actividad física.
No vayas a querer empezar de lleno con la dieta, la nueva rutina de ejercicio, el decirle adiós al azúcar y al pan de un día para el otro. Según Valeria, esto sólo hará que te hartes pronto y no lograrás hacer un nuevo hábito. “Cambiar los hábitos no debe voltear de cabeza tu vida. No debe ser complicado porque entonces te consume tanto que terminas dejándolo”, dijo.
Esto va de la mano con el tip anterior. Valeria señala que al momento de adquirir un nuevo hábito es de suma importancia que se integre a tu rutina diaria y no la altere demasiado. “Si quieres hacer ejercicio, no lo pongas a primera hora del día si no te gusta despertar temprano”, explicó.
Empezar una dieta puede ser difícil sobre todo si tu pareja o tu familia no quiere seguir el mismo régimen, por eso Valeria recomienda encontrar alguien que te ayude a reforzar ese hábito y te sea mucho más fácil seguirlo.
Propónle a tu amiga del trabajo salir a correr después de la oficina o haz que tu pareja deje también los refrescos para evitarte la tentación.
mrf
