Nos han creado una auténtica necesidad.
Las gafas de sol son un complemento que, pese a su nombre, no entienden de condición climatológica y mucho menos de estación. Es cierto que cuando más uso les damos es en verano, cuando el sol pega más, pero incluso en los días más nublados de invierno pueden ser nuestras mejores amigas y funcionar a modo de diadema. ]]>