El expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica, de 88 años, enfrenta una lucha contra el cáncer de esófago, un diagnóstico que recibió en abril de este año. Según el semanario Búsqueda, el cáncer se ha extendido al hígado, complicando gravemente su estado de salud y limitando las opciones de tratamiento disponibles.
El cáncer de esófago, que afecta el tubo que conecta la garganta con el estómago, es conocido por su alta agresividad y tendencia a hacer metástasis en órganos cercanos, como el hígado. En el caso de Mujica, esta expansión ha sido confirmada recientemente, marcando un giro crítico en su condición médica.
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En declaraciones al diario El País, Mujica explicó que las enfermedades crónicas que padece –una inmunológica y otra relacionada con su edad avanzada– han descartado las opciones de quimioterapia y cirugía. “No me cabe ni un tratamiento bioquímico ni la cirugía porque mi cuerpo no lo aguanta”, afirmó.
De acuerdo con especialistas, las enfermedades inmunológicas pueden dificultar la tolerancia del cuerpo a los tratamientos convencionales contra el cáncer, al debilitar aún más el sistema inmunitario. Además, la edad avanzada del expresidente representa un factor de riesgo que limita la efectividad de las intervenciones.
El diagnóstico inicial fue realizado durante un chequeo médico de rutina, cuando los especialistas detectaron un tumor en el esófago. Mujica, consciente de la gravedad de su situación, decidió compartir la noticia públicamente, manteniendo la serenidad que lo caracteriza.
