La inauguración del Megapuerto de Chancay ha puesto en los ojos del mundo a Perú, ubicándolo como candidato a convertirse en el futuro hub logístico de la región. Esta megaobra impulsada por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) con inversión de China y ejecutada por Cosco Shipping apunta a ser el principal ingreso y salida del comercio internacional hacia Asia, Europa y otros países de América Latina.
Sin embargo, su construcción ha significado también ciertos estragos en las zonas aledañas al megapuerto en el distrito de Chancay, provincia de Huaral. Desde la construcción de una futura Vía de Evitamiento que enfrenta a la alcaldía de Chancay con el MTC hasta el reclamo de decenas de comerciantes que refieren que una de las playas del litoral ha quedado 'destruida' como consecuencia.
Entre los rezagos que ha dejado la construcción del Megapuerto de Chancay, se encuentra la situación en la playa Chorrillos, por la que la Asociación de Negociantes de la Playa Chorrillos-Chancay acusa a Cosco Shipping de dejar el espacio lleno de materiales que fueron usados para la megaobra, entre ellos geotubos y llantas.
La vocera Angélica Valencia señaló que son 70 socios, entre comerciantes y sombrilleros, los que se ha visto afectados. Los geotubos que instalaron el verano pasado están ahora destruidos y ha ocasionado que se recorte el espacio de la arena, afectando justo en la temporada alta de verano 2025, refiere.
Valencia indica que, en una ocasión anterior, la empresa china se comprometió a hacer mantenimiento en la playa, y crear espacios de arena mediante estos geotubos, pero, el resultado ha sido lo contrario. "Están destruidos, lleno de piedras y no hay turismo. Nos sentimos burlados. La playa está llena de llantas y con costales rotos, no hay gente que venga", afirmó.
Debido a la afectación en la playa Chorrillos, la asociación señala que trabajadores de Cosco Shipping están realizando trabajos de limpieza en el área, llevándose las llantas para el mantenimiento de la misma durante estos primeros días de enero; sin embargo, argumentan no estar de acuerdo con que se realice en este periodo de verano, en que los comerciantes impulsan sus negocios.
El gerente de Cosco Shipping, Carlos Tejada, contó a La República que la destrucción de los geotubos, parte del plan de recuperación de playas, se debe a actos de vandalismo registrados por los mismos residentes del balneario de Chorrillos, quienes, refiere, han cortado con punzones las estructuras de tecnología holandesa, valorizada en millones de dólares y que han tenido buenos resultados en las otras playas aledañas de Chancay.
Tejada indica que la empresa ha llevado a cabo varios intentos por realizar la limpieza de la playa, enviando brigadas desde hace cuatro meses, pero han sido impedidos y hasta amenazados con armas, pues ellos les exigen una compensación económica. "No quieren que le arreglemos la playa, prácticamente es un chantaje, una extorsión, quieren dinero aduciendo una afectación", precisa.
Cosco asegura que han contratado a una empresa terciaria para que realicen la limpieza de la playa, pese a que aún no se ha probado que ellos sean responsables de la afectación ambiental. "Desde octubre queremos limpiar la playa, pero no nos dejan, antes del verano hemos ido, pero nos amenazaron con pistola, eso lo presentaremos ante la fiscal", argumenta el gerente.
Por su parte, la asociación de comerciantes califica la acción de la empresa como 'tardía', pues esta temporada no hay actividad comercial en la playa Chorrillos.
Es importante precisar que, los geotubos que refieren los comerciantes fueron parte de la primera etapa de protección de las playas de Chancay durante la construcción del puerto. Estos fueron una medida complementaria durante la obra como acción preventiva a una futura erosión del mar ante oleajes o fuertes corrientes, contemplados dentro del estudio de impacto ambiental realizado por Cosco.
Este proceso de recuperación de playas consistía en extraer arena de pocos metros de la orilla para almacenarla en la parte trasera de la playa, de manera que, al instalar los geotubos, tipos contenedores subterráneos, esa arena extraída se colocaba en los laterales para elevar el nivel de la playa.
Si bien el proceso se llevó con éxito en otras playas del distrito, en Chorrillos, los actos vandálicos que argumenta Cosco han impedido que se continúe con el plan en marcha. Ello, con el claro objetivo de sacar un provecho económico, indica su gerente.
Los geotubos que refiere la asociación de comerciantes en Chorrillos fueron parte de la primera etapa de protección de las playas de Chancay durante la construcción del puerto. Este proceso consistía en extraer arena de pocos metros de la orilla para almacenarla en la parte trasera de la playa, de manera que, al instalar los geotubos, tipos contenedores subterráneos, esa arena extraída se colocaba en los laterales para elevar el nivel de la playa.
Es importante precisar que estos geotubos fueron una medida complementaria en el Megapuerto de Chancay como acción preventiva a una futura erosión del mar ante oleajes o fuertes corrientes. Todo ello dentro del estudio de impacto ambiental realizado por Cosco.
Frente a la situación en la playa Chorrillos, los comerciantes han increpado a la Municipalidad de Chancay, a través de la Gerencia de Gestión Integral de Residuos Sólidos, pero no han recibido respuesta concreta: "Hemos presentado documentos para llegar a un diálogo, para una mesa de trabajo, queremos que nos arreglan la playa como era antes, con el alcalde, la Marina, Cosco, pero no responden".
En tanto, a través de una carpeta fiscal, fechada el tres de enero del presente 2025, el Ministerio Público dispuso su participación en una diligencia convocada por el subprefecto de Huaral a fin de llegar a acuerdos entre los involucrados. Asimismo, se ofició al MTC, a la Capitanía del Puerto de Chancay y a la Municipalidad Distrital para que se informe sobre las medidas adoptadas frente a este conflicto ambiental que enfrenta a una parte de la población, autoridades y a la compañía.
Tanto Cosco Shipping, como la asociación de comerciantes, piden una mesa de diálogo con las autoridades municipales y gubernamentales para llegar a un consenso, pese a las incidencias registradas que han generado tensión entre la empresa china y los 70 negociantes agrupados. Hasta el momento no han tenido un acercamiento, pese a que la empresa insiste en la reparación de la playa.
