Matthew Livelsberger, un militar en activo de 37 años, falleció en un incidente trágico cuando la Cybertruck que alquiló estalló frente al hotel Trump International en Las Vegas. Las autoridades investigan el suceso como un posible acto premeditado.
El FBI ha confirmado la identidad de Livelsberger, quien había conducido más de diez horas desde Colorado Springs. La explosión, que dejó su cuerpo calcinado, ha generado múltiples interrogantes sobre las circunstancias que rodearon este evento. Según los forenses, el soldado murió de un disparo en la cabeza antes de la detonación.
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Las autoridades han encontrado una pistola Desert Eagle semiautomática en el lugar del incidente, lo que ha llevado a la especulación sobre la naturaleza del suceso. El sheriff del condado de Clark, Kevin McMahill, ha manifestado cautela en la identificación del individuo, aunque se hallaron documentos que confirman la identidad de Livelsberger.
Matthew Alan Livelsberger era un miembro de los boinas verdes, una unidad de élite del ejército estadounidense. Ingresó a las fuerzas armadas en 2006 y recibió entrenamiento en el Fuerte Bragg, conocido por su enfoque en tácticas antiterroristas. Durante su carrera, sirvió en diversas misiones en Afganistán, Tayikistán y el Congo, y fue condecorado con varias distinciones, incluyendo estrellas de Bronce por mérito en combate.
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Livelsberger estaba de permiso en Estados Unidos para pasar las festividades navideñas, mientras su base se encontraba en Alemania. Su último empleo, según su perfil de LinkedIn, era el de encargado de sistemas autónomos y remotos, lo que implicaba la operación de drones del Ejército. La familia del soldado ha expresado su sorpresa ante los acontecimientos, describiéndolo como un patriota ferviente.
El incidente ocurrió el miércoles, cuando Livelsberger llegó a Las Vegas y se dirigió al hotel Trump International. Tras aparcar la Cybertruck, comenzó a salir humo del vehículo, que estalló poco después. Las imágenes de seguridad del hotel capturaron el momento de la explosión, que no causó daños significativos a la estructura del hotel, gracias al diseño del vehículo.
Las autoridades han encontrado en la camioneta tanques de gasolina y fuegos artificiales, lo que sugiere que la explosión fue intencionada. El FBI ha descartado cualquier conexión con otros incidentes recientes, como el ataque en Nuevo Orleans, y ha calificado el suceso como un hecho aislado. La investigación continúa para determinar si se trató de un acto de terrorismo.
La comunidad y los medios han reaccionado con asombro ante la noticia de la muerte de Livelsberger. Su tío, un veterano de la Guerra de Vietnam, lo describió como un "supersoldado" que amaba a su país y al expresidente Donald Trump. La familia ha solicitado privacidad mientras se desarrollan las investigaciones.
El FBI y las autoridades locales están trabajando en conjunto para esclarecer los detalles del incidente. La colaboración de Tesla ha sido crucial para rastrear el recorrido de Livelsberger y obtener información sobre su viaje a Las Vegas. A medida que se revelan más detalles, la atención se centra en las motivaciones detrás de este trágico evento.
