La inflación en Perú cerró con una tasa de 1,90% en 2024, lo que significó el regreso al rango meta que aspira el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). A partir de ese dato, la entidad monetaria resaltó la estabilidad monetaria del país en comparación con las cifras de la región e incluso del mundo.
En 2020 fue la última vez que se cumplió con el objetivo del BCRP, cuando se registró 2,15%, por lo que tuvieron que pasar cuatro años para que Perú tuviera una inflación inferior al 3%. Los precios peruanos se incrementaron por los shocks externos, en especial por la guerra entre Rusia y Ucrania en 2022. A continuación, te contamos más detalles del reciente anuncio de la institución presidida por Julio Velarde.
El Banco Central de Reserva del Perú subrayó que la inflación nacional se encuentra por debajo del 2,0%, lo que es una situación particular a nivel mundial. Con este resultado, Perú se posiciona como el país con el período más extenso de inflación de un solo dígito en América Latina, ya que alcanza un total de 27 años y 11 meses de estabilidad.
Este hito representa la fase de estabilidad monetaria más prolongada en la región desde la década de 1950. Incluso, de acuerdo con el banco central, el porcentaje se sitúa por debajo de lo observado en economías avanzadas, como la eurozona, que presenta un 2,3%, y Estados Unidos, con un 2,7%, en función de los datos disponibles hasta noviembre de 2024.
La estabilización de los precios en Perú se explica por la moderación de los productos de alimentos y bebidas no alcohólicas en 2024, que solo aumentaron 0,59%, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), aunque estos bienes cayeron 0,32% en diciembre del año pasado. Otro sector importante que presentó mayor estabilidad fue el de transportes, cuyos precios aumentaron 1,83% en los últimos 12 meses.
La principal herramienta del Banco Central de Reserva del Perú es la tasa de interés de referencia, que es el precio del dinero en el país. De esta manera, cuando la inflación aumenta a altos niveles, el ente emisor incrementa la tasa de interés para encarecer el dinero y restringir la actividad económica. En consecuencia, se desalienta el consumo y el crédito entre los agentes económicos, mientras que se promueve el ahorro. Así, se incentiva a que la demanda de los consumidores se reduzca y, por ende, caigan los precios.
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El BCRP informó que el tipo de cambio cerró en S/3,761 en 2024, lo que indica una depreciación del 1,5% del sol respecto al cierre del año anterior, que fue de S/3,707. A diferencia de esta situación, las principales monedas de la región sufrieron una depreciación considerable, con caídas que superaron los dos dígitos.
Por otro lado, varias divisas sufrieron notables depreciaciones en comparación con el dólar estadounidense. El real brasileño registró una caída del 27,47%. Luego se encuentra el peso mexicano, que ha experimentado una devaluación del 21,83%. Por su parte, el peso chileno y el peso colombiano también han evidenciado descensos significativos, con un 12,49% y un 13,68%, respectivamente.
