Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), los casos de Norovirus parecen estar aumentando en varias partes de los EE. UU. Se reportaron más de 90 brotes durante la semana del 5 de diciembre, la más reciente con datos disponibles, según los CDC.
Los datos de los CDC de años anteriores para la misma semana de diciembre mostraban un máximo de 65 brotes reportados. Los datos nacionales de los CDC reflejan lo que los estados y condados de todo el país han informado.
El norovirus es un virus altamente contagioso que causa gastroenteritis aguda, una inflamación del estómago y los intestinos. Es conocido comúnmente como el "virus del vómito de invierno" debido a que los brotes suelen ocurrir en climas fríos, aunque puede propagarse en cualquier época del año.
Por lo general, una persona infectada desarrollará síntomas entre 12 y 48 horas después de contraer el norovirus. Sin embargo, la infección generalmente se resuelve rápidamente en adultos sanos y dura de uno a tres días, según los CDC. Estos síntomas generalmente aparecen entre 12 y 48 horas después de la exposición al virus y suelen durar entre 1 y 3 días. Los principales síntomas incluyen:
El norovirus se propaga principalmente a través de:
Incluso pequeñas cantidades del virus son suficientes para causar infección, lo que lo hace extremadamente contagioso.
No existe un medicamento específico para el norovirus, por lo que el único tratamiento disponible es manejar los síntomas. Los CDC recomiendan mantenerse hidratado y beber líquidos que repongan los electrolitos perdidos a través de la diarrea y vómitos.
Aunque los síntomas se resuelven en pocos días para la mayoría, ciertos grupos, como los menores de 1 año, los ancianos y las personas inmunodeprimidas, tienen un alto riesgo de deshidratación grave. Los expertos en salud aconsejan lavarse las manos con agua tibia y jabón durante 20 segundos para prevenir el contagio del norovirus, ya que el desinfectante de manos no es efectivo contra este virus.
Los CDC aconsejan lavarse las manos después de usar el baño o cambiar pañales, así como antes de comer, preparar o manipular alimentos. Para evitar la contaminación de los alimentos, asegúrate de lavar las frutas y verduras, y de que los mariscos estén cocidos a una temperatura interna de al menos 145 F.
