La gastronomía de Sudamérica no se limita a sus platos salados y bebidas emblemáticas, sino que también incluye postres. Entre ellos, destaca el helado, sobre todo uno tradicional dentro de su país y que fue reconocido como el mejor de la región por Taste Atlas. A pesar de tener una calificación de más de 4 estrellas, este postre no se posicionó en los primeros lugares a nivel mundial.
Elaborado con leche, azúcar, canela y clavo de olor, su textura suave y especiada se ha convertido en un símbolo de la tradición de este país sudamericano. Este postre, que debe su nombre a su apariencia similar al queso rallado, es reconocido por Taste Atlas por su calidad y también por su presencia en la plataforma que considera la mejor gastronomía de Sudamérica.
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El queso helado, un postre tradicional de Arequipa, Perú, fue reconocido como el mejor helado de Sudamérica por el Taste Atlas, con una calificación de 4.7 estrellas. Este postre, que no contiene queso a pesar de su nombre, se elabora artesanalmente con leche, azúcar, canela, clavo de olor y coco rallado, logrando un sabor dulce y especiado.
Su apariencia, que recuerda al queso rallado, y su textura suave lo convierten en un símbolo de la gastronomía arequipeña. Este reconocimiento posiciona al queso helado por encima de otras famosas preparaciones como el dondurma turco y el gelato italiano.
Su elaboración utiliza técnicas tradicionales sin maquinaria moderna. Es un emblema cultural de Arequipa, presente en festividades locales y ferias gastronómicas. Su reconocimiento en Taste Atlas no solo enaltece la riqueza de la cocina peruana, sino que también impulsa el turismo en la región, consolidándolo como un referente de la creatividad y tradición culinaria sudamericana.
El queso helado se prepara de manera artesanal, utilizando ingredientes simples. Primero, se calienta en una olla un litro de leche entera o evaporada junto con una rama de canela, clavos de olor y azúcar. Este paso permite que la leche tome los sabores de las especias, mientras se mezcla cuidadosamente para evitar que se pegue.
Luego, se retira del fuego, se añaden coco rallado (opcional) y esencia de vainilla, y se deja enfriar a temperatura ambiente. Este proceso crea la base dulce y especiada que caracteriza al queso helado.
El tradicional queso helado arequipeño se elabora utilizando un barril de madera como método artesanal de congelación. Dentro del barril se coloca un recipiente metálico donde se vierte la mezcla de leche, azúcar, especias y coco rallado. Alrededor del recipiente se añade una mezcla de hielo y sal, lo que genera un enfriamiento rápido gracias a la reducción del punto de congelación del agua.
Durante el proceso, la mezcla se raspa y remueve constantemente para evitar la formación de cristales de hielo grandes y lograr una textura suave. Este método no solo asegura la calidad del helado, sino que también conserva la autenticidad de esta tradición culinaria arequipeña.