El Puente Ruyi, inaugurado en septiembre de 2020, se ha convertido en un ícono del turismo en China gracias a su diseño único y su espectacular ubicación en el valle de Shenxianju, provincia de Zhejiang. Inspirado en el ruyi, un cetro tradicional chino que simboliza buena fortuna, el puente desafía la percepción con su estructura ondulada que recuerda a una hélice de ADN.
Con una longitud de 100 metros y suspendido a una altura de 140 metros sobre un barranco, esta obra del arquitecto He Yunchang combina arquitectura moderna y elementos de la tradición china. Su superficie de vidrio transparente añade un emocionante desafío para los amantes de las alturas, quienes pueden disfrutar de una experiencia única.
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El Puente Ruyi es una de las estructuras más innovadoras de China. Diseñado por el renombrado ingeniero He Yunchang, conocido por proyectos como el Estadio Nacional de Pekín, este puente ondulado consta de tres pasarelas que se entrelazan para crear una forma única.
La inspiración detrás del diseño proviene del ruyi, un símbolo chino de prosperidad y poder. Su estructura es visualmente impactante y está cuidadosamente diseñada para garantizar la seguridad de los visitantes. Antes de su apertura, fue sometido a rigurosas pruebas para comprobar su resistencia ante factores como el viento y el peso de cientos de personas.
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El puente está anclado en los picos montañosos del valle de Shenxianju, un entorno natural que amplifica su atractivo visual. Rodeado de paisajes montañosos, cascadas y ríos, ofrece una experiencia que combina adrenalina, cultura y naturaleza.
Caminar por el Puente Ruyi es un desafío incluso para los más valientes. Su suelo acristalado permite a los visitantes ver directamente el abismo bajo sus pies. Además, el valle de Shenxianju, donde se encuentra el puente, es un destino turístico por excelencia. Este lugar ofrece 80 puntos panorámicos, desde los cuales es posible contemplar un paisaje de montañas rocosas y bosques que parecen flotar entre la niebla en días húmedos.
Desde su inauguración, el Puente Ruyi ha recibido a más de 200.000 visitantes, consolidándose como una de las atracciones turísticas más populares de China.
