El panorama migratorio en Estados Unidos podría dar un giro drástico en 2025 con el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca. Tom Homan, designado por el presidente electo como su "zar fronterizo", ha declarado que la próxima administración implementará políticas estrictas contra la inmigración indocumentada, incluyendo la construcción de centros de detención para albergar familias inmigrantes en proceso de deportación.
En una entrevista con The Washington Post, Homan confirmó que una de las medidas más controversiales será el restablecimiento de la separación familiar, suspendida durante el gobierno de Joe Biden. Además, defendió que deportar a los padres, independientemente de si tienen hijos nacidos en Estados Unidos, será una prioridad. Según Homan, estas políticas buscan disuadir el cruce ilegal de la frontera sur y reforzar la seguridad nacional.
De acuerdo con Tom Homan, la estrategia migratoria propuesta por la administración Trump tiene como objetivo principal desalentar los cruces fronterizos de inmigrantes ilegales al imponer medidas más severas. Una de las iniciativas clave será la construcción de nuevos centros de detención familiares, similares a los utilizados durante el primer mandato de Trump, los cuales cerraron en 2021 tras recibir duras críticas por parte de defensores de derechos humanos y pediatras.
Homan explicó que estas instalaciones incluirán carpas de paredes blandas, utilizadas previamente para alojar a inmigrantes detenidos en la frontera. Justificó que este enfoque es necesario para manejar la cantidad de familias que intentan ingresar a Estados Unidos sin documentación legal. Asimismo, enfatizó que los recursos y la capacidad del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) serán determinantes para ejecutar estas políticas de manera eficaz.
Conocido por su postura rígida en materia de inmigración, Tom Homan es una figura central en los planes de Trump para reforzar la frontera. Exdirector de operaciones de cumplimiento y deportación de ICE, Homan es reconocido como el principal impulsor de la separación familiar como táctica disuasoria. Durante su gestión en el gobierno de Barack Obama, implementó medidas que endurecieron las deportaciones, ganándose el apodo de "el gran deportador".
En su nuevo rol como "zar fronterizo", Homan trabajará junto a Kristi Noem, gobernadora de Dakota del Sur, quien liderará el Departamento de Seguridad Nacional. Ambos tienen como meta reinstaurar políticas eliminadas por Biden, como el programa Quédate en México, que obligaba a los solicitantes de asilo a permanecer en territorio mexicano mientras esperaban sus audiencias.
La posibilidad de que encarcelen familias inmigrantes ha generado reacciones mixtas. Mientras algunos sectores ven estas medidas como un medio para garantizar el orden y la seguridad, organizaciones de derechos humanos las consideran inhumanas y perjudiciales para los menores involucrados. Estudios han demostrado que la detención familiar afecta negativamente la salud mental y emocional de los niños, un argumento que motivó el cierre de estas instalaciones en 2021.
Por otro lado, expertos en políticas migratorias advierten que el restablecimiento de estas medidas podría incrementar las tensiones diplomáticas con países como México, dado que el programa Quédate en México ya había sido criticado por generar una crisis humanitaria en la frontera. A pesar de las críticas, Homan ha insistido en que la separación familiar y las deportaciones masivas son herramientas efectivas para reducir los cruces ilegales y reforzar la soberanía fronteriza de Estados Unidos.
