Miguel Ángel Heredia Saravia, un joven de 26 años con doble nacionalidad peruana y venezolana, fue asesinado esta madrugada en el jirón Pico Paya, cerca de la avenida Cordillera Occidental, en la urbanización Delicias de Villa, distrito limeño de Chorrillos.
La víctima fue bajada de un automóvil Nissan blanco con lunas polarizadas y, posteriormente, recibió varios disparos. Luego del ataque, el vehículo atropelló su cuerpo antes de que los agresores se dieran a la fuga con rumbo desconocido.
Imágenes de cámaras de seguridad captaron el momento del crimen, proporcionando pruebas fundamentales para la investigación. En las grabaciones, se observa cómo Heredia fue obligado a bajar del vehículo antes de ser asesinado.
Agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP), pertenecientes a la dependencia de Mateo Pumacahua, acudieron al lugar para resguardar la zona y coordinar las diligencias. Se encontraron más de tres casquillos de bala en la escena del crimen, y el equipo de criminalística del Ministerio Público se encargó de recoger las pruebas y proceder con el levantamiento del cadáver para trasladarlo a la Morgue Central de Lima.
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Las autoridades han comenzado a analizar las grabaciones de seguridad para identificar a los responsables y esclarecer los motivos del asesinato.
Este caso refleja el incremento de asesinatos en el Perú. Según el Sistema Nacional de Defunciones (Sinadef), hasta el 30 de noviembre se registraron más de 1.800 homicidios, superando ampliamente los 1.431 casos del 2023. Estas cifras vienen superando todos los récords y cuestionan los resultados del estado de emergencia decretado en algunos distritos de Lima y el Callao, estrategia impulsada contra la criminalidad por el ministro del Interior, Juan José Santiváñez, y el gobierno de Dina Boluarte.
