El pasado sábado 21 de diciembre, un espectáculo de drones en el Lake Eola Park, en Orlando, Florida, se convirtió en una tragedia inesperada. Durante el evento, varios drones perdieron el control y uno de ellos impactó directamente en el pecho de un niño de 7 años, identificado como Alexander Edgerton. El incidente ocurrió mientras cientos de familias disfrutaban del Holiday Drone Show, un espectáculo anual que atrae a residentes y turistas.
El impacto fue tan severo que Alexander sufrió una lesión crítica en el corazón, lo que requirió una cirugía a corazón abierto de emergencia. Además, el menor presentó cortes y laceraciones en el rostro debido a las hélices del dron. La madre del menor, Adriana Edgerton, relató entre lágrimas cómo su hija fue la primera en encontrar a Alexander tirado en el suelo con sangre en el rostro tras el impacto.
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Tras el accidente, el evento fue suspendido de inmediato, y los servicios de emergencia trasladaron al niño a un hospital cercano. La ciudad de Orlando canceló la segunda presentación programada para esa noche, citando "problemas técnicos" y priorizando la seguridad de los asistentes.
El Departamento de Bomberos de Orlando confirmó que hubo múltiples reportes de drones fuera de control y al menos otro herido leve durante el evento. Por su parte, la Administración Federal de Aviación (FAA) inició una investigación para determinar las causas del fallo, barajando hipótesis como errores en el software, fallos en el GPS o interferencias externas.
Actualmente, Alexander permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en un hospital de Orlando. Los médicos han informado que su estado es estable, pero su recuperación será lenta y requerirá atención constante en los próximos meses.
Su madre, Adriana, agradeció las muestras de apoyo recibidas y pidió a las autoridades que tomen medidas contundentes para evitar que otros niños sufran un accidente similar.
La compañía responsable del espectáculo, Sky Elements Drones, emitió un comunicado lamentando profundamente el incidente. Aseguraron que colaborarán plenamente con las autoridades para esclarecer las causas y evitar que sucesos similares vuelvan a ocurrir en el futuro.
"Nos tomamos la seguridad de nuestros eventos con la máxima seriedad. Estamos trabajando con expertos y las autoridades para comprender lo que salió mal y garantizar que no se repita", señaló un representante de la empresa.
Los expertos en tecnología advierten que estos dispositivos, aunque impresionantes visualmente, pueden representar un peligro si no se manejan adecuadamente. El uso de drones en eventos masivos debe ir acompañado de estrictas regulaciones y protocolos de seguridad.
La comunidad de Orlando ha expresado su solidaridad con la familia Edgerton. Las redes sociales se han llenado de mensajes de apoyo y oraciones por la pronta recuperación de Alexander.
