La marca Loro Piana se encontró en el centro de la controversia tras las críticas sobre su relación con comunidades que les abastecían lana. Un ejecutivo de la empresa admitió en una reunión que no tenía conocimiento sobre si se compensaba adecuadamente a los trabajadores por la fibra de vicuña utilizada en sus productos.
Las acusaciones de presunta explotación laboral han surgido después de un informe de Bloomberg Businessweek que reveló que algunos trabajadores peruanos no recibían pago por su labor en la captura de vicuñas, animales de los cuales se obtiene la lana más fina del mundo. A pesar de las críticas, Loro Piana sostiene que cumple con las normativas y que los pagos son gestionados por las comunidades locales.
En abril, durante una mesa redonda entre la industria textil, Eliphas Coeli, director general de Loro Piana en Perú, hizo declaraciones que evidencian la falta de información de la empresa sobre las condiciones laborales en su cadena de suministro. Coeli afirmó que la compañía realiza pagos a las comunidades, pero que la distribución de esos fondos queda fuera de su control. Este comentario ha sido interpretado como un reconocimiento de las lagunas en la supervisión de las condiciones laborales.
Loro Piana ha respondido a las críticas aumentando las auditorías a sus proveedores y colaborando con ONG locales para implementar proyectos en áreas como infraestructura, salud y educación en comunidades relacionadas con la vicuña. La empresa reafirma su compromiso con prácticas empresariales responsables y sostiene que ha respetado la legislación peruana y las costumbres locales durante los últimos 30 años.
"Loro Piana reafirma firmemente su compromiso de hace mucho tiempo con las prácticas empresariales éticas y responsables. En los últimos 30 años, la empresa ha respetado plenamente la legislación peruana, la ética y los regímenes de trabajo de las comunidades locales reconocidos por la Constitución, así como sus prácticas legítimas, como el 'Chaccu', que se celebra todos los años durante un día", indicó el director general, Eliphas Coeli.
El código de conducta de LVMH, la empresa matriz de Loro Piana, establece que los proveedores deben pagar salarios que cubran las necesidades básicas de los trabajadores. En respuesta a las críticas, Loro Piana ha lanzado una campaña para sensibilizar a sus proveedores sobre la importancia de cumplir con este código. Coeli mencionó que los proveedores peruanos están firmando este código, pero también reconoció la complejidad de asegurar la responsabilidad indirecta en la cadena de suministro.
