Aceites y Conservas Beltrán, fundada por Eduvigis Beltrán, ha logrado destacarse en el competitivo mercado peruano gracias a su enfoque en la calidad y en precios accesibles. Además, esta marca ha realizado inversiones en tecnología y sostenibilidad para garantizar estándares elevados en sus procesos de fabricación y distribución.
Con más de 20 años de trayectoria, Beltrán ofrece una variada gama de aceites y conservas de pescado, así como otros productos alimenticios. La historia de este emprendimiento es un claro ejemplo de perseverancia y adaptabilidad, lo que permite a la marca mantenerse relevante y competitiva en el mercado.
Eduvigis Beltrán, ante la crisis económica de los años 90 en Perú, dejó su natal Huánuco en busca de mejores oportunidades. Comenzó su carrera como comerciante ambulante y, tras establecerse en el mercado de Caquetá, se convirtió en vendedor mayorista. “Agradezco al mercado de Caquetá por darme los primeros inicios como comerciante ambulante”, expresó Beltrán en una entrevista.
En julio de 2001, Eduvigis fundó oficialmente su marca, enfocándose en la venta de conservas de pescado. Su amplia cartera de clientes facilitó el éxito inicial y expandió su distribución a diversas regiones del país. En 2003, la empresa dio un paso significativo al iniciar la producción de aceites 100% de soya, lo que consolidó su presencia en el mercado.
Durante la pandemia de COVID-19, muchas empresas optaron por aumentar los precios de sus productos, pero Beltrán decidió mantener sus costos. “Hicimos un buen cierre de materia prima en buena cantidad, y eso nos tiene todavía sosteniéndonos”, comentó el empresario. Esta decisión permitió a la marca seguir ofreciendo productos accesibles a sus consumidores, a pesar del aumento de costos en insumos.
Beltrán destacó que, de no haber tomado medidas adecuadas, los precios de sus productos podrían haber aumentado considerablemente. Sin embargo, su enfoque en la salud del consumidor y la calidad de sus productos ha sido fundamental para mantener la lealtad de sus clientes.
Hoy en día, Industrias Belsa, la empresa detrás de la marca Beltrán, cuenta con dos marcas: Beltrán y Belini. Además de aceites y conservas de pescado, la empresa ha diversificado su oferta e incluye fideos y jabones. Con 22 años en el mercado, Beltrán continúa esforzándose por ofrecer lo mejor a los peruanos, priorizando siempre la salud de sus consumidores.
“Cuidamos la salud de nuestro consumidor, es lo más importante. Muchos fabrican productos por querer ganar dinero, pero nosotros no hacemos eso”, afirmó Beltrán, quien resaltó su compromiso con la calidad y el bienestar de sus clientes.
La marca también ha sabido adaptarse a las nuevas tendencias digitales, utilizando plataformas como TikTok e Instagram para interactuar con sus consumidores. En estas redes, comparten recetas y promociones, lo que acerca sus productos a un público más amplio.
En cuanto a precios, el aceite Beltrán se puede encontrar al por mayor, con un precio estándar de S/5,90 por una botella de 1 litro. Esta accesibilidad ha sido clave para mantener su competitividad en un mercado donde los precios han fluctuado considerablemente.
El aceite de soya, uno de los productos estrella de la marca, es conocido por sus múltiples beneficios. Es alto en ácidos grasos poliinsaturados, no contiene ácidos grasos trans y tiene un sabor neutro, lo que lo convierte en una opción versátil para la cocina. Además, su alto punto de humeo lo hace ideal para diversas técnicas de cocción.
Con dos sedes productivas, una en Chimbote y otra en Huachipa, Aceites y Conservas Beltrán sigue creciendo y adaptándose a las necesidades del mercado. La perseverancia y el compromiso con la calidad son fundamentales para el éxito empresarial.
