La Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), reconocida como una de las instituciones académicas más prestigiosas de América Latina, tiene una historia marcada por constantes transformaciones. Entre ellas, destaca eliminación de una carrera universitaria con gran potencial en el mercado internacional. Este programa académico, habilitado en 1941, tuvo una vida breve y dejó un legado de apenas 12 graduados.
Pese a su alta proyección laboral, la carrera desapareció en 1946, en un contexto de desafíos económicos y tecnológicos. En esa época, el Perú buscaba fortalecer su capacidad aeronáutica, tanto militar como comercial, pero las limitaciones financieras y la falta de infraestructura llevaron a la UNI a cerrarla
Ingeniería Aeronáutica fue la carrera que solo alcanzó a formar 12 profesionales en la UNI. Según el tomo III de la obra Historia de la Universidad Nacional de Ingeniería, de la autora Katya Rodríguez Valencia, la carrera de Ingeniería Aeronáutica se impartía cuando la institución aún llevaba el nombre de Escuela de Ingenieros. Este programa nació en un periodo en el que el Perú enfrentaba tensiones bélicas con países vecinos. En 1938, la Escuela de Ingenieros, predecesora de la UNI, envió a cuatro graduados de Ingeniería Civil al Real Politécnico de Turín, en Italia, para que se especializaran en este campo.
El programa tomó impulso con la creación del Ministerio de Aeronáutica en 1941, pero su vigencia fue efímera. Los primeros dos años de estudio compartían el currículo de Ingeniería Mecánica, y recién en los últimos dos se abordaban temas específicos de aeronáutica. Este enfoque limitó su capacidad de especialización y contribuyó a su baja continuidad.
La principal razón para la eliminación de Ingeniería Aeronáutica fue la dependencia económica del Estado. A partir de 1945, el Ministerio de Aeronáutica canceló las becas de especialización en Estados Unidos, privando a los estudiantes de una formación avanzada.
Además, la carrera demandaba una infraestructura costosa y tecnología avanzada, recursos que no podían ser sostenidos por una universidad pública. La falta de estabilidad financiera y el escaso apoyo gubernamental sellaron el destino de este programa académico, que quedó archivado como una promesa incumplida en la historia de la UNI.
Actualmente, la UNI ofrece una amplia gama de carreras de ingeniería que incluyen:
Cada una de ellas se adapta a las necesidades del mercado, consolidando a la UNI como un referente en la formación técnica y científica del país.
Con el objetivo de responder a las demandas del futuro, la UNI ha anunciado la implementación de nuevas carreras innovadoras como:
El rector López-Chau destacó que la carrera de Inteligencia Artificial ya cuenta con el respaldo de la facultad, lo que marca un avance en la oferta educativa. Estas propuestas buscan consolidar a la UNI como líder en la educación de áreas emergentes y de alta demanda tecnológica
