José Joshua Curay Ferrer, Director General de la Oficina de Protocolo de la Presidencia de la República, ha sido denunciado por presuntos actos de acoso y violencia física. Las denuncias, interpuestas a través del sistema de denuncias ciudadanas del Estado, fueron reveladas en una investigación del portal La Encerrona.
La primera denuncia fue presentada por una periodista, quien asegura haber sido acosada por Curay durante su labor profesional, y afirma que el 28 de febrero de este año experimentó otro episodio similar. La segunda denunciante acusa al funcionario de agresión física en una denuncia presentada el 19 de octubre y declaró incluso estar esperando un hijo del diplomático. Ante ambas denuncias, La Encerrona intentó obtener respuesta de la oficina de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores, quienes respondieron que el caso fue trasladado a la Presidencia de la República.
La Encerrona también buscó comunicarse directamente con la oficina de Curay Ferrer, pero se les indicó que debían enviar sus preguntas por correo electrónico. Mientras tanto, la Presidencia de la República les emitió un comunicado el 26 de octubre, confirmando que las denuncias estaban siendo tramitadas de acuerdo con sus procedimientos y que se ha iniciado una investigación. Sin embargo, el funcionario informó no había sido notificado de acción sobre estos casos.
José Joshua Curay Ferrer se pronunció luego que se dieran a conocer las dos denuncias en su contra. "A la fecha, no tengo conocimiento de que se haya iniciado un procedimiento específico por las denuncias anónimas", acotó el diplomático, descartando haber sido notificado sobre el tema.
En los descargos que Curay envió a La Encerrona, se refirió sobre la situación de presunto acoso: "Jamás me he expresado con comentarios impropios hacia ninguna persona, dentro o fuera de mi centro de labores, negando específicamente conductas de acoso, tocamientos o propuestas indecentes. Con relación a los colegas periodistas, no es mi función recibirlos u organizarlos. No tengo contacto con ellos".
Asimismo, acotó que cualquier denuncia exige la presentación de indicios o documentos para iniciar una investigación. "Sin pruebas o indicios, resulta imposible ejercer una imputación clara, lo que implicaría una denuncia de mala fe", agregó. Ante esta versión, La República se puso en contacto con Presidencia de la República para conocer las acciones que están tomando respecto a este caso, e informaron que la oficina de Integridad es quien está a cargo de la investigación y, al manejarse de manera autónoma, ellos tienen sus tiempos y procesos sobre estos tema.
Fuentes cercanas a Palacio de Gobierno informaron a este medio que las denuncias fueron anónimas sin dejar algún tipo de contacto ni mayores pruebas que puedan ayudar a corroborar los hechos que le señalan a Curay Ferrer. Además, respecto a las contradicciones entre el comunicado emitido por Presidencia y lo declarado por el diplomático, donde asegura no haber sido notificado al respecto, señalan que se debe a los procesos que lleva el departamento de Integridad dentro del Despacho Presidencial.