En una decena de programas difundidos por Willax TV, la periodista Milagros Leiva y su productor Enrique Montenegro, atribuyen al empresario Fernando Pazos Huayamares haber participado en una red de corrupción que encabezaba Sada Goray Chong, quien enfrenta a la justicia por haber pagado sobornos a un exfuncionario del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), para obtener financiamiento en beneficio de proyectos inmobiliarios de su empresa Marka Group.
Pese a que Pazos negó las imputaciones, algunas de estas basadas en declaraciones no comprobadas de la colaboradora eficaz Pilar Tijero, los periodistas prosiguieron con las mismas acusaciones. En declaraciones ante la fiscalía del caso, el empresario reconoció haber invertido en dos proyectos de Marka Group, pero negó haber tenido contactos con funcionarios del MVCS y menos haber pagado coimas, por lo que se encuentra en condición de testigo.
Al continuar las publicaciones, y no haber rectificado sus contenidos, el 8 de febrero de este año Fernando Pazos presentó querella por difamación agravada contra Milagros Leiva Gálvez y Enrique Montenegro.
Sorprendentemente, la jueza Rosmery Orellana Vicuña, sin revisar los 7 medios probatorios que presentó el accionante, ni visualizar los videos adjuntos, en menos de 4 horas, declaró improcedente la demanda.
Porque resultaba improbable que la magistrada Orellana hubiera revisado la abundante evidencia, el empresario apeló la decisión al comprobar que la autoridad no se tomó la molestia de verificar la información.
El 29 de abril, la Cuarta Sala Penal de Apelaciones declaró fundado el recurso de apelación y dispuso la admisión a trámite de la querella de Fernando Pazos contra Leiva y Montenegro. Ahora la jueza Rosmery Orellana deberá pronunciarse sobre la procedencia o no de la acción de Pazos.
La defensa del empresario arguye que en el caso de Leiva, desde su programa y su cuenta personal “X”, “sin ninguna evidencia, o medio de prueba, atentó contra el honor de Fernando Pazos al señalar explícitamente hechos falsos, como por ejemplo: que eran gran amigo de la señora Goray, que le daba plata en efectivo para sus actos de corrupción, que se encontraba investigado por el Ministerio Público tres datos que son absolutamente falsos y que al ser difundidos abiertamente sin ningún reparto, corroboración o verificación, en una red de comunicación social masiva, lesiona y daña el derecho fundamental al honor”.
Parte de las imputaciones de Leiva hacían referencia a supuestas manifestaciones de la colaboradora eficaz Pilar Tijero, examiga íntima de Sada Goray. Durante sus declaraciones, Pilar Tijero presentó como abogado a César Nakazaki.
Este diario solicitó en varias oportunidades a Milagros Leiva una contestación a la querella de Pazos, pero no lo hizo. Su abogado César Nakazaki llamó para decir que él daría las respuestas.
“La querella versa sobre diversos reportajes que hizo Leiva vinculando a (Fernando) Pazos respecto al caso de Sada Goray. Lo que hemos hecho es decir en qué se basan las afirmaciones, programa por programa. Ya hemos cumplido con sustentar cada uno de los programas que se cuestionan. Damos justificación: tema de interés público e información veraz, no hay delito ahí”, explicó Nakazaki.
Preguntado si no le pareció sorprendente que la jueza Rosmery Orellana archivara la querella contra su patrocinada sin haber revisado la evidencia, Nakazaki respondió: “El Poder judicial no ha dicho que (la jueza) ha actuado de manera precipitada, lo que ha señalado es que la querella tiene material suficiente para admitirse a trámite. ¿Por qué? Porque la jueza se basa en los mismos comentarios periodísticos que pone como extractos en la querella Pazos. Entonces el Poder Judicial dijo: por lo menos visualiza los videos. No hay nada de prematuro y arbitrario. No hay nada de irregular”.
En parte del material periodístico que forma parte de la querella del empresario Fernando Pazos, se citan declaraciones de la colaboradora eficaz Pilar Tijero, que es patrocinada por César Nakazaki. Nakazaki también representa a Milagros Leiva, a quien Pazos demanda por difundir las manifestaciones sin sustento de Tijero.
Nakazaki dijo que hablaría por Leiva: “La defensa de Milagros Leiva es el ejercicio regular de la libertad de expresión porque todas las afirmaciones que cuestiona Fernando Pazos por intermedio de su abogado, de que son difamaciones, todas son expresiones que se basan en fuentes confiables o en el trabajo de otros periodistas”, señaló.
“El caso no se reduce en que ella le dice cómplice y él es testigo, no es exacto, ese no es el caso. Pazos tiene una serie de investigaciones abiertas por lavado de activos”, manifestó.
Al respecto, la defensa del empresario respondió: “Fernando Pazos no tiene ninguna investigación penal abierta en su contra”.
La jueza Rosmery Orellana ha citado a las partes para la audiencia del inicio del juicio este martes 29 de octubre, en la que se sustentarán las respectivas posiciones.