Los dirigentes de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) presionaron este miércoles a la junta militar de Birmania y los rebeldes a tomar "medidas concretas" para relanzar el proceso de paz y poner fin a la guerra civil.
Los diez países que integran la ASEAN están reunidos en la capital de Laos, Vientián, para una cumbre de tres días centrada en la crisis en Birmania, gobernada por una junta militar desde el golpe de Estado de 2021.
En la reunión, los miembros del bloque abordarán también la situación en el disputado mar de China Meridional, escenario de violentos choques entre buques chinos y pescadores de Filipinas y Vietnam.
La ASEAN ha intentado durante tres años encontrar una solución negociada a la crisis de Birmania, que ha dejado miles de muertos y millones de desplazados.
El bloque de 10 países excluyó a los dirigentes de la junta birmana de sus cumbres tras el golpe de Estado, y los militares rechazaron las invitaciones para enviar a "representantes no políticos".
Pero este año la junta militar accedió a enviar a Aung Kyaw Moe, un alto cargo del Ministerio de Relaciones Exteriores birmano, lo que generó expectativas de un avance.
A finales de septiembre la junta que gobierna Birmania invitó a los grupos armados a que cesen los combates e inicien conversaciones de paz, tras una serie de derrotas militares.
Los dirigentes de la ASEAN condenan los ataques contra civiles e "instan a todas las partes implicadas a tomar medidas concretas para detener inmediatamente la violencia indiscriminada", según un borrador de la declaración de la presidencia de la cumbre, al que tuvo acceso a la AFP.
La ASEAN ya había planteado una hoja de ruta de cinco puntos a Birmania, para restablecer la paz después del golpe que derrocó al gobierno del partido de Aung San Suu Kyi, premio Nobel de la paz. Pero la junta ignoró el texto y continuó la represión contra los opositores políticos y los combates contra los rebeldes.
Los dirigentes del bloque condenaron a Birmania por ignorar el plan de cinco puntos en las cumbres de 2022 y 2023 e insistieron este miércoles que esta hoja de ruta sigue siendo la "referencia principal" para abordar la crisis, según el borrador.
El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos, dijo a los periodistas que se buscan fórmulas para "avanzar".
"Tenemos que admitir que aunque los cinco puntos fueron planteados (...) no han sido muy efectivos a la hora de cambiar la situación", afirmó.
bur-pdw/rsc/mas/ag-an/eg