La historia de Candiss Rojas es una de esfuerzo y dedicación. A sus 17 años, ingresó a dos de las universidades más prestigiosas del país: la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), en su primer intento, alcanzando el primer puesto en ambas.
Originaria de Huancayo, ha demostrado que con disciplina se pueden superar las barreras de la distancia y las dificultades propias de la preparación para las solicitudes de admisión. En una entrevista con La República, la cachimba compartió su historia.
Candiss Mishel Rojas Mellado es una estudiante de 17 años que cursa el quinto de secundaria en el colegio Praxis, en Huancayo. Aunque aún no ha culminado sus estudios escolares, este año ingresó en primer lugar a la PUCP y a la UNMSM para la carrera de ingeniería biomédica.
"Mi preparación comenzó el año pasado, en diciembre. Aquí, en Huancayo, hay una academia que ofrece ciclos para San Marcos, y desde entonces estuve enfocada en ese objetivo", expresó.
Desde temprana edad, ella tuvo claro que su objetivo era postular a San Marcos, considerando la PUCP como una oportunidad para evaluar su nivel académico. "Siempre tuve en mente San Marcos, pero al prepararme surgió la posibilidad de postular a la Católica. Mis padres me alentaron a intentarlo, y así fue como también logré ingresar allí", explicó.
Su preparación para el examen de admisión de San Marcos fue intensa. Asistía al colegio por las mañanas y, por las tardes, continuaba con sus clases en la academia Aula 20 de manera virtual.
"Desde diciembre hasta marzo estuve en clases presenciales en una academia, después inicié el colegio y continué con las clases virtuales de preparación", manifestó.
La cachimba supo equilibrar sus estudios escolares con su preparación para el examen de admisión, manteniendo una rutina disciplinada. "Estudiaba básicamente todo el día, desde las 8 de la mañana hasta las 11:30 de la noche. No solo de lunes a sábado, sino también los domingos", agregó.
Para rendir el examen de admisión de la UNMSM, ella viajó a Lima con su familia un día antes, lo que le permitió estar más tranquila el 6 de octubre, cuando le tocó dar su prueba.
"Llegamos el sábado por la noche para evitar preocupaciones con el horario del día siguiente, ya que sabía que cerraban temprano. Con tranquilidad, llevé todos los documentos requeridos y mis padres me esperaron afuera mientras rendía el examen", comentó.
La joven salió del examen con dudas sobre su desempeño, pero confiada en que había dado lo mejor de sí. Esto se reflejó en su puntaje de 1.552, que le permitió no solo ingresar, sino también obtener el primer puesto en su carrera. "Sabía que me había ido bien, pero no pensé que lograría el primer puesto. Mi meta era solo ingresar", admitió.
La decisión de Candiss de estudiar ingeniería biomédica no fue casual. Desde su perspectiva, esta carrera le permitirá aportar a su comunidad en Huancayo en un área que considera de gran importancia.
"En Huancayo vi la dificultad que tienen las personas para acceder a tratamientos médicos y el mal estado de los equipos en las clínicas. Por eso decidí estudiar ingeniería biomédica, para ayudar a mejorar esa situación", finalizó.
