El anuncio del ministro de Defensa, Walter Astudillo, quien reafirmó que el Gobierno ampliará el penal de máxima seguridad de Challapalca para trasladar a sentenciados y procesados por los delitos de sicariato, secuestro, extorsión y posesión de armas de fuego de uso ilegal, fue rechazado por dirigentes de gremios puneños.
Amador Núñez, presidente del Frente de Organizaciones Populares (FOP), aseguró que el Gobierno de Dina Boluarte prefiere esconder su inoperancia en el tema de inseguridad enviando presos de la capital a su zona. Vale recordar que si bien Challapalca está ubicado en Tacna, está muy cerca a Puno,
“Los delincuentes que se formaron en Lima se deben quedar en Lima. No saben qué hacer ni cómo enfrentar la delincuencia y salen con esa alternativa que no soluciona nada. Por el contrario, a nosotros nos genera demasiada inseguridad. Ese problema lo hemos vivido hace tiempo”, aseguró el dirigente.
En tanto, Leonel Quispe, poblador de Capazo, recordó que su pueblo está próximo al penal de Challapalca y pese a ser una zona alejada es muy peligrosa porque desde hace buen tiempo se viene registrando atracos sin que se esclarezca ninguno de los casos reportados hasta ahora.
“La delincuencia se fortalece porque tiene a sus mejores defensores en el Congreso de la República. El problema es que hacen leyes blandas para que el delincuente sea el más protegido y no el ciudadano. Creen que con ampliar una cárcel, a lo cual nosotros nos oponemos, se van a solucionar las cosas”, manifestó.
El Comité de Lucha de Ilave anunció que pedirá que los congresistas de la República intervengan porque Puno no puede ser visto como una zona de castigo de delincuentes.
“Esta idea de aplicación está cargada de muchos prejuicios. Nosotros lo rechazamos. Primero que encarcelen a los congresistas en todo caso por tanto lobby a favor de privados y en desmedro del ciudadano”, dijo Florencio Cutipa, dirigente.
