Donald Trump ha vuelto a poner la inmigración en el centro de su campaña para las elecciones presidenciales de 2024. El expresidente ha presentado propuestas que buscan endurecer las políticas actuales, enfocándose en la deportación masiva de inmigrantes indocumentados y la reforma del sistema de green cards para estudiantes.
Trump afirma que su objetivo es "restaurar el orden" en las fronteras y reducir drásticamente la inmigración ilegal. Uno de los pilares de su campaña es un plan de deportaciones masivas que, según él, ayudará a "recuperar empleos tomados por inmigrantes ilegales". No obstante, también propone una excepción para estudiantes extranjeros que se gradúen de universidades estadounidenses, quienes recibirían una green card automáticamente para permanecer en el país.
Donald Trump ha mantenido una postura clara y firme en cuanto a la inmigración desde su primera campaña en 2016. En 2024, una de sus principales promesas es la deportación masiva de hasta 20 millones de inmigrantes indocumentados. Según él, estas personas representan una amenaza para la seguridad nacional y la economía.
Su compañero de fórmula, J. D. Vance, indicó que el plan comenzaría con un millón de deportaciones en una primera fase. Trump ha insistido en que estas medidas ayudarán a recuperar los empleos perdidos, especialmente en las comunidades afroamericanas e hispanas, que, según él, se ven más afectadas por la competencia de los inmigrantes ilegales.
A pesar de su dura postura en cuanto a la inmigración ilegal, Trump ha propuesto una medida enfocada en retener talento: otorgar green cards automáticamente a estudiantes extranjeros que se gradúen en universidades estadounidenses. Según Trump, estos inmigrantes calificados podrían contribuir a la economía, crear negocios y generar empleo en el país.
La propuesta tiene como objetivo retener a los "mejores y más brillantes" en Estados Unidos tras completar sus estudios. Esta política refleja un enfoque diferente dentro de su plan migratorio, enfocándose en atraer y mantener talento extranjero calificado, a pesar de sus estrictas medidas contra la inmigración ilegal.
Si Donald Trump es elegido nuevamente como presidente en 2024, su enfoque hacia la inmigración podría generar grandes cambios. Las deportaciones masivas afectarían a millones de inmigrantes indocumentados, lo que podría aumentar la tensión en comunidades latinas y urbanas.
Además, las redadas y la separación de familias podrían volverse más comunes, generando un ambiente de temor entre los inmigrantes. Por otro lado, la propuesta de green cards para estudiantes extranjeros sería vista como una oportunidad positiva para aquellos que desean estudiar y trabajar en Estados Unidos. Sin embargo, los críticos señalan que este cambio no compensaría los efectos negativos que las deportaciones masivas tendrían en el tejido social y económico del país.