En los últimos años, algunas de las marcas más poderosas de América Latina han encontrado un nuevo destino para sus inversiones: el mercado de Estados Unidos. Aunque tradicionalmente enfocadas en sus países de origen, estas empresas han comenzado a mirar hacia el norte en busca de nuevas oportunidades.
Detrás de esta tendencia está la búsqueda de diversificación y la necesidad de mitigar riesgos en medio de la incertidumbre económica de Latinoamérica. Mientras algunos se preguntan qué marcas están protagonizando este movimiento y qué tipo de inversiones están realizando, una de ellas está a punto de cerrar una operación histórica que involucrará más de US$1.200 millones.
Grupo FEMSA, propietario de OXXO, ya ha comenzado a incursionar en el mercado de tiendas de conveniencia de Estados Unidos. La empresa mexicana adquirió recientemente 249 tiendas por US$385 millones. Estos nuevos locales están situadas en estaciones de servicio de las gasolineras DK y Alon a lo largo de la red de carreteras entre El Paso y Dallas, y forman parte de la estrategia de FEMSA para expandirse en el sector minorista internacional y reducir su dependencia del mercado mexicano.
Asimismo, Liverpool, la reconocida cadena de tiendas departamentales mexicana, ha decidido aumentar su presencia en Estados Unidos a través de una importante inversión en Nordstrom, una empresa similar en el sector de retail. La operación, que implica una inversión de unos US$1.226 millones, otorgará a Liverpool el 49,9% de las acciones, mientras que la familia fundadora retendrá el 50,1%. Esta estrategia de expansión se lleva a cabo en un contexto en el que la cadena norteamericana no se ha recuperado por completo desde la pandemia.
La estrategia de expansión de ambas cadenas hacia Estados Unidos se da en un momento en que la economía mexicana enfrenta incertidumbres, como la depreciación del peso frente al dólar, que ha pasado de 16 a casi 20 pesos en pocos meses, en medio de las reformas al Poder Judicial de México mediante cambios en la Constitución, según detalla el periodista Jonathan Ruiz Torre del diario El Financiero.
Liverpool y FEMSA no son las únicas marcas mexicanas que han visto en Estados Unidos un terreno fértil para sus inversiones. Chedraui, una de las principales cadenas de supermercados de México, ya ha realizado movimientos importantes. En 2021, adquirió la compañía Smart & Final por US$620 millones. Desde entonces, el valor de esta compañía ha crecido un impresionante 420%, demostrando que la diversificación geográfica puede ser una estrategia exitosa para las marcas mexicanas que buscan nuevos mercados.
Además, muchas empresas mexicanas dedicadas a sectores como el software, los servicios y las industrias creativas están buscando clientes en el extranjero. Esta tendencia, que sigue creciendo, no se limita a las grandes corporaciones, sino que también incluye a empresas más pequeñas que buscan posicionarse en mercados internacionales.
