El peso mexicano se apreció el miércoles tras la adopción en el Senado de ese país de una controvertida reforma judicial, un movimiento que se explica por tomas de beneficios de los operadores.
Hacia las 19H55 GMT, la divisa de la duodécima economía del mundo subía 1,55% frente al dólar, a 19,7945 pesos por billete verde. También subía ante el euro y la libra esterlina.
"Las posiciones especulativas a la baja se habían acumulado" en contra del peso en las últimas semanas, explicó Brad Bechtel, analista de Jefferies. "Finalmente votaron la reforma judicial y eso desató una ola de toma de ganancias", añadió.
México será el primer país del mundo que elija a todos sus jueces por voto popular, tras la aprobación de una reforma del presidente izquierdista Andrés Manuel López Obrador que según sus detractores fulmina la independencia de poderes.
El mercado se inquieta por la ausencia de contrapeso político al oficialismo en el parlamento mexicano.
Esa situación alteró la trayectoria del peso, que durante mucho tiempo fue una moneda utilizada para el "carry trade". Este mecanismo consiste en tomar créditos en una moneda cuyo banco emisor tiene tasas bajas y colocarla en otra moneda con tasas de referencia más altas, como la mexicana.
La tasa directriz de política monetaria del banco central de México (Banxico) es de 10,75% anual.
Pero el dominio electoral del partido de López Obrador a inicios de junio llevó a los cambistas a alejarse del peso mexicano por temor a que se fragilizaran las instituciones y se produjera un derrape de las finanzas públicas.
A inicios de agosto, el peso cayó a su nivel más bajo en dos años.
Para Brad Bechtel, el impulso del miércoles es apenas un movimiento técnico vinculado a la salida de operadores especulativos del ruedo, y no augura un fortalecimiento del peso.
Para los analistas de Brown Brothers Harriman, el movimiento del peso el miércoles se explica también por el resultado del debate presidencial en Estados Unidos, que según observadores tuvo un mejor desempeño de la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, sobre el expresidente Donald Trump.
Para algunos cambistas, una menor probabilidad de victoria de Trump aleja la perspectiva de nuevas barreras arancelarias y por lo tanto de un debilitamiento del comercio entre México y Estados Unidos, lo cual beneficia al peso ya que este panorama supone mayor ingreso de dólares al país.