Santa Cruz, la capital económica de Bolivia y enclave de la oposición, realiza este viernes una huelga de 24 horas contra el reciente censo que, según líderes cívicos, fue manipulado por el gobierno para restarles población, recursos públicos y representación legislativa.
La protesta fue convocada por el comité cívico del departamento de Santa Cruz, que reúne a gremios y organizaciones opuestas al Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido en el poder y cuyo liderazgo se disputan el presidente Luis Arce y el exmandatario Evo Morales (2006-2019).
Durante este viernes cierran los comercios —incluidos los mercados de abasto— y no hay circulación de vehículos, además están previstas movilizaciones y el bloqueo de vías, anunció el comité.
"Es un paro cívico en rechazo a los resultados del censo", remarcó el presidente de ese colectivo, Jorge Larach, en rueda de prensa.
Según las fuerzas opositoras de Santa Cruz, el gobierno, a instancias del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), cometió un "fraude" en el censo realizado en marzo, cuyos datos fueron revelados hace una semana.
Denunciamos el "escamoteo de cientos de miles de habitantes al pueblo boliviano en general, a los que residen en Santa Cruz en particular; al que se le priva del justo y equitativo acceso a recursos fiscales (...) así como se nos coarta una vez más, la correcta reasignación de escaños parlamentarios", sostuvo el comité cívico en un comunicado.
De acuerdo con el padrón, Bolivia alcanzó este año poco más de 11,3 millones de habitantes, de los cuales el 27,5% vive en Santa Cruz.
Con 3.115.386, Santa Cruz superó por primera vez a La Paz y es el departamento más poblado de Bolivia.
Sin embargo, los organizadores de la huelga dicen que el dato fue manipulado y está por debajo de las proyecciones que realizó el mismo INE.
Asimismo, señalaron que el Instituto Cruceño de Estadística (ICE) —adscrito a la gobernación— estimó para todo el departamento poco más de cuatro millones de habitantes.
El censo es empleado como referencia para la asignación de recursos estatales, así como de escaños en el legislativo de cara a las elecciones generales de 2025.
Alcaldías y gobernaciones en manos de la oposición también han expresado sus críticas al censo y han pedido una auditoría internacional.
Con "esta estafa, este fraude, lo que nos han hecho es robar millones y millones de dólares en este momento que no hay plata", insistió Stello Cochamanidis, dirigente del Comité Cívico, en declaraciones a la prensa.
Según el INE, la población total de Bolivia aumentó un 12,45% con respecto al empadronamiento de 2012.