En la última edición de la Feria Internacional del Libro, se pudo apreciar varias exposiciones como parte del circuito del evento. Una de ellas fue la muestra Tejiendo identidad del artista trujillano Antonio Zegarra. Fotografía, intervención y arte digital fusionados para homenajear a nuestros principales artistas e intelectuales peruanos en el marco del bicentenario. Una mirada atenta a la serie de imágenes, denotaba que, en algunas de ellas, como en la de Alfredo Bryce, los rostros de los personajes estaban cubiertos por una malla, semejante a una gasa, signada por las gráficas de los tejidos de la cultura Chancay: plumas, algodón y lana.
Pues bien, acabada la FIL, Zegarra expuso en el ICPNA de Trujillo la que podría considerarse su exposición mayor: Proyecto Vallejo. Al respecto, la homónima pieza homónima está conformada por 48 piezas de 20 x 20 cm. A ello, una docena de la misma tiene señas distintas puesto que cada una mide 140 x 140 cm y el enfoque sigue siendo el rostro del personaje.
“Mi padre, un reconocido cirujano, trabajó con rostros de personas quemadas. Pero este interés por los rostros me vino en la pandemia, hasta antes, mi trayectoria se conducía en el diseño gráfico. Mi trabajo hasta entonces era un placer visual, no profundizaba más allá de mis emociones. Pero cuando llegó el Covid, mis padres se contagiaron en una reunión justo antes de entrar al confinamiento. Empecé a investigar sobre las pandemias y de alguna manera conecté con mi mundo más profundo, como tener presente a los pacientes quemados que vi en mi infancia y decidí buscar belleza en donde la gente por lo general no la ve”, dice Zegarra a La República.
Por la magnitud de las obras, cada pieza exige que se trabaje una por una y en esa dinámica, Zegarra deposita toda su obsesión.
“Hay que trabajar las piezas al mínimo detalle y más si se trata de rostros. Intervenir la imagen de Vallejo, lo tenía pensado desde hace mucho tiempo, pero recién en la pandemia decidí trabajar en los rostros como símbolo de humanidad”, señala el artista en cuya muestra podemos ver igualmente los rostros de personajes reconocidos, y hasta famosos en algunos casos, como Marilyn Monroe y María Félix.
“Exploro a mis personajes porque tienen algo de mí. Muchos son personajes de la cultura popular y antes de intervenir sus rostros, investigo sus biografías”, enfatiza.
Sobre el debate que suscita el arte digital, Zegarra indica:
“Se cree que el arte digital es fácil, pero no, es una técnica como la pintura y la acuarela, que requiere de práctica. Además, la inteligencia artificial ya está con nosotros y sé que hay temor a que las manifestaciones artísticas tradicionales desaparezcan, pero no va a ser así. Un artista debe estar seguro de lo que quiere hacer, esa seguridad le permitirá una convivencia con las posibilidades que le brinda la tecnología, a la que debemos ver como aliada, no es enemiga del artista. Perú es un país conservador que aún ve con reojo el arte digital”.
