La policía antimotines intervino por primera vez este jueves para dispersar algunos de los bloqueos en Bogotá y sus alrededores durante la cuarta jornada de protestas de transportistas en Colombia contra el alza del precio del diésel.
Cientos de vehículos de carga obstruyen el paso desde el lunes en las vías de acceso a la capital y a las principales ciudades del país, en respuesta a un aumento de cerca del 20% en el valor del galón (3,8 litros) de ese combustible hasta los 2,7 dólares.
"Después de que el gobierno nacional nos diera luz verde, iniciamos la intervención por parte de la policía de Bogotá en 5 puntos críticos de la ciudad para levantar bloqueos", indicó el alcalde capitalino, Carlos Fernando Galán, en la red social X.
Con unos 1.200 uniformados, la unidad antidisturbios despejó con gases lacrimógenos un punto de bloqueo en el norte de la capital de 8 millones de habitantes.
También intervinieron en los alrededores de una estación de buses en el sur de Bogotá, la ciudad más afectada del país.
Unos 130 kilómetros al norte de la capital, la policía habilitó la vía que conecta a Bogotá con Tunja, en el departamento de Boyacá. Los bloqueos persisten, pero con menor intensidad en la ciudad.
La alcaldía de la capital informó que una cuarta parte de la flota de transporte público se encuentra inactiva.
En su último balance, la policía informó de 120 bloqueos permanentes en todo el país, 82 bloqueos intermitentes y afectaciones en más del 70% de los departamentos en Colombia.
El alcalde de Bogotá dijo que Corabastos -la principal plaza de mercado de Colombia- registra una reducción del 40% en el flujo de alimentos recibidos, comparado con la semana anterior. "Empezamos a ver señales de aumento de precios", agregó.
De su lado, la Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica informó que cerca del 30% de los cargamentos de medicamentos en todo el país están represados.
Ecopetrol, la empresa estatal de petróleos, anunció la suspensión de actividades en al menos cinco campos de producción petrolera a raíz de los bloqueos que impiden "el normal desarrollo de sus operaciones".
Este jueves se registró además el primer partido de fútbol aplazado por los bloqueos, entre el Junior y el Deportivo Pereira, previsto para el viernes en Barranquilla.
Tras varias jornadas de negociaciones con los gremios de transportistas sin llegar a acuerdos, el gobierno del izquierdista Gustavo Petro propuso moderar los aumentos en el precio del diésel, con alzas mensuales equivalentes a cinco centavos de dólar por cada galón de gasolina hasta diciembre.
"Sabemos distinguir perfectamente qué es un paro empresarial (...), siempre tiene oscuros intereses económicos o políticos", dijo Petro el miércoles en referencia a los promotores de la huelga, a quienes vincula con las fuerzas de derecha.
