Un trágico asesinato ocurrió en San Juan de Lurigancho cuando Jaime Pinedo Acosta, un vigilante de 53 años, fue acribillado a tiros en el mercado La Cachina. El ataque, ejecutado por dos sicarios, ocurrió mientras la víctima cumplía su turno laboral. Pinedo su víctima de más de nueve disparos a quemarropa.
Su esposa, Betty Salazar, denunció que su esposo había recibido amenazas de muerte de su exjefe, quien lo habría llamado recientemente para advertirle que lo mataría. Aunque algunos vecinos sugieren que el crimen podría estar vinculado al cobro de cupos, Salazar sostiene que las amenazas provenían del exjefe de Pinedo.
La víctima, que llevaba más de 20 años trabajando en el mercado, deja tres hijos y una familia destrozada que clama por justicia. La viuda ha pedido que las autoridades actúen rápidamente y capturen a los responsables del asesinato. "Mi esposo no merecía morir así", declaró consternada.
Los comerciantes del mercado La Cachina, donde ocurrió el crimen, están preocupados por su seguridad y temen ser las próximas víctimas. Algunos ya están considerando medidas adicionales para protegerse ante el temor de nuevos atentados en la zona por supuestos cobros de cupos.
Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer los motivos del asesinato y detener a los responsables. Mientras tanto, la comunidad de San Juan de Lurigancho sigue en alerta, esperando resultados de las investigaciones.
El reciente crimen en contra del vigilante Pinedo Acosta se suma al último asesinato registrado en una de las zonas de San Juan de Lurigancho, en dónde se involucró a un hombre que recibió 20 disparos de bala frente a un colegio del distrito. Finalmente, los últimos sucesos en SJL ponen en alerta a la ciudadanía.
Asimismo, a inicios del mes de setiembre se conoció que trabajadores de la Línea 50 habían sufrido el ataque de delincuentes armados mientras se encontraban esperando su turno en una agencia bancaria del distrito.