Las embarcaciones de lujo son uno de los símbolos más representativos de la riqueza. Desde pequeños yates hasta gigantescos superyates, los millonarios encuentran en estos navíos una forma de ostentar su fortuna. El mercado de los yates de lujo ha crecido en los últimos años, con precios que superan los cientos de millones de dólares. Sin embargo, hay un yate que destaca por encima de todos.
El History Supreme, aunque de pequeño tamaño en comparación con otras embarcaciones, se ha ganado el título del yate más caro del mundo. Su estructura, hecha en oro macizo, lo convierte en una pieza única. Pero no solo el material de construcción lo distingue, también sus extravagantes decoraciones interiores.
El History Supreme es considerado el yate más caro del mundo debido a sus materiales únicos y lujosos. Con una eslora de solo 30 metros, el tamaño no es su característica más impresionante. Lo que realmente lo distingue es que gran parte de su estructura está hecha de oro macizo, un elemento poco común en la construcción de embarcaciones.
El yate fue diseñado por Stuart Hughes, un diseñador británico conocido por sus trabajos con materiales lujosos. Hughes tardó más de tres años en completar el proyecto, utilizó alrededor de 100.000 kilos de oro, plata y platino para recubrir tanto el exterior como el interior del yate. Esta cantidad de oro no solo cubre el casco, sino también los interiores, como las barandillas y el ancla, todas hechas de este preciado metal.
El nivel de excentricidad en este yate va más allá de los materiales usados para su construcción. Una de las características más llamativas es un acuario panorámico hecho con 68 kilos de oro de 24 quilates, una muestra de opulencia sin igual. Además, entre las curiosidades que adornan el interior del History Supreme, destaca una botella de licor decorada con diamantes, que forma parte de las personalizaciones únicas de Hughes.
Otra de las excentricidades que lo diferencian es la decoración del camarote principal, donde una de las paredes está adornada con huesos auténticos de un Tiranosaurio rex, además de fragmentos de meteorito en otra parte del yate. Este tipo de elementos prehistóricos no es la primera vez que se ven en los diseños de Hughes, quien ya había incorporado fósiles de dinosaurios en algunos de sus trabajos anteriores, como un iPad personalizado.
El propietario del History Supreme ha sido objeto de rumores desde su creación. Si bien no hay confirmaciones oficiales, se cree que el dueño podría ser Robert Kuok, el hombre más rico de Malasia, cuya fortuna proviene de la industria del azúcar y otros negocios. Aunque Forbes valora su patrimonio en más de 11.800 millones de dólares, la existencia del yate no ha sido plenamente confirmada.
A pesar de que su valor es impresionante, lo más curioso de todo es que el History Supreme nunca ha sido visto navegando en mar abierto. Este hecho ha alimentado especulaciones sobre si realmente existe o si es una simple pieza de exhibición guardada en alguna colección privada. Lo cierto es que, si el yate llegara a hundirse, se convertiría en un tesoro submarino de incalculable valor debido a la cantidad de oro que lo compone.
El valor del History Supreme está estimado en 4.800 millones de dólares, lo que lo convierte en el yate más caro del mundo. A diferencia de otros superyates que se destacan por su tamaño y tecnología, el History Supreme es una pieza única por sus materiales y decoraciones inusuales. El precio actual del oro ha contribuido a que esta embarcación se mantenga como la más costosa hasta la fecha.
En comparación, otros superyates como el Eclipse, propiedad del multimillonario Roman Abramovich, o el Azzam, del exmandatario de Emiratos Árabes Unidos, poseen mayores dimensiones, pero no alcanzan el nivel de lujo y excentricidad del History Supreme.
Lo que está claro es que, más allá de su uso, el History Supreme es una inversión que ha mantenido su valor, gracias a los metales preciosos con los que está construido.
