El exgobernador del Banco de Líbano (BDL, emisor), Riad Salamé, sospechoso de corrupción en su país y en el extranjero, fue arrestado el martes en Beirut, informó a AFP una fuente judicial.
Salamé, de 74 años, fue "arrestado después de haber sido interrogado durante tres horas por el fiscal general en relación con sospechas de malversación de fondos del BDL que superan los 40 millones de dólares", precisó esta fuente que solicitó el anonimato.
Salamé fue gobernador del banco central desde 1993 hasta julio de 2023, y muchos lo acusan, junto con los líderes políticos con los que tiene estrechos vínculos, del colapso de la economía en Líbano.
Sospechoso de una malversación masiva de fondos públicos libaneses y de haberse constituido un rico patrimonio inmobiliario y financiero, el exbanquero francolibanés niega todas las acusaciones.
Es la primera vez que comparece ante la justicia desde que expiró su mandato el 31 de julio de 2023.
No se encontró un sucesor debido a la crisis política en el país, y el primer vicegobernador, Wassim Mansuri, asumió el cargo de manera interina.
Desde 2016 Salamé emprendió esquemas financieros comparados con una "pirámide de Ponzi", y a fines de 2019 comenzó el colapso que hizo que la libra libanesa perdiera más del 98% de su valor y privó a las personas de todo acceso a sus fondos en los bancos.
Salamé, que no respondió a una citación de un juez francés en mayo de 2023, está sujeto a una orden de arresto internacional.
Líbano se niega a extraditar a sus ciudadanos.
Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido han impuesto sanciones económicas por corrupción contra él.
