El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos se prepara para imponer sanciones individuales a funcionarios del Gobierno venezolano, quienes, según la información compartida por Bloomberg, estarían involucrados en la manipulación y obstrucción del proceso electoral que resultó en la reelección de Nicolás Maduro el pasado julio.
Además, el Departamento de Estado planea aplicar restricciones de visa a 34 familiares de estos funcionarios, en un esfuerzo coordinado por incrementar la presión sobre el régimen chavista.
Las 15 sanciones que Estados Unidos planea imponer se centran en los funcionarios del régimen venezolano acusados de obstruir las elecciones presidenciales del 28 de julio, en las que Nicolás Maduro fue reelegido.
Entre las acciones específicas, el Departamento de Estado adelantó que se realizará la cancelación de visas a 34 familiares directos de los sancionados.
Los funcionarios que serán objeto de estas sanciones incluyen altos cargos del Consejo Nacional Electoral (CNE), miembros del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y figuras prominentes de la Asamblea Nacional controlada por el chavismo. Además, también se encuentran en la lista de sancionados líderes de las fuerzas de seguridad, específicamente del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) y de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM).
Estos funcionarios son señalados por haber colaborado activamente con Maduro en la manipulación de los resultados electorales, asegurando su permanencia en el poder a pesar del mar de denuncias de fraude y la creciente oposición interna y externa.
A medida que las denuncias de fraude se multiplican, la comunidad internacional continúa cuestionando la legitimidad del proceso electoral del 28 de julio. Diversos informes han señalado la falta de transparencia y las tácticas intimidatorias utilizadas por el régimen para asegurar la victoria de Maduro.
Estas acusaciones tomaron fuerza tras la orden de captura emitida por un tribunal venezolano contra Edmundo González, el candidato que, según los resultados de la oposición, habría ganado las elecciones.
Sin embargo, en un reciente discurso, el mandatario instó a sus seguidores a mantenerse unidos y alertas frente a lo que calificó como intentos desestabilizadores de la "oposición fascista". Además, el presidente chavista ha reiterado su compromiso con una "revolución permanente" que, según él, es la única vía para enfrentar las amenazas internas y externas que enfrenta su gestión.
"Soy el primer presidente chavista y cuando entregue el mando, cuando toque, se lo entregaré a un presidente chavista", expresó Maduro.
El régimen de Nicolás Maduro ordenó la detención de Edmundo González Urrutia el pasado 2 de septiembre. González, quien cuenta con un significativo respaldo popular, ha sido acusado por el Ministerio Público y un tribunal venezolano de conspirar contra el Estado.
Luego de dictarse la orden de aprehensión, la comunidad internacional no tardó en responder y condenar esta vulneración de los derechos humanos y evidencia clara de una persecución política orquestada por el chavismo. Asimismo, María Corina Machado mostró su total rechazo ante este atropello.
"Han perdido toda noción de la realidad. Amenazando al presidente electo, solo logran cohesionarnos más y aumentar el apoyo de los venezolanos y el mundo a Edmundo González. Serenidad, coraje y firmeza. Avanzamos", expresó la líder opositora a través de un tuit.
