Estados Unidos y la Unión Europea (UE) anunciaron el lunes una misión de rescate de un petrolero que arde desde hace dos semanas frente a las costas de Yemen tras ser atacado por los rebeldes hutíes de ese país árabe.
Estos insurgentes aliados de Irán reivindicaron el 21 de agosto haber detonado varias cargas explosivas en el buque "Sounion", de bandera griega, que transportaba 150.000 toneladas de crudo.
Según un mensaje en la red social X del comando militar de Estados Unidos para Oriente Medio (Centcom), está "en marcha" el rescate de este navío "todavía en llamas", que representa una amenaza de una "grave catástrofe ambiental".
Horas antes, la misión Aspides de la UE informó en la misma plataforma que iba a garantizar "la protección de los remolcadores que se encargarán de la operación de rescate y facilitará sus esfuerzos para evitar una catástrofe ambiental" en el mar Rojo, zona clave para el comercio internacional.
"Varios incendios continúan ardiendo en el puente principal del navío" pero, por ahora, "no hay señales visibles de un vertido de hidrocarburos", agregó.
La tripulación del buque, compuesta por 23 filipinos y dos rusos, fue rescatada un día después del ataque hutí por una fragata francesa que integra la misión europea.
La operación Aspides se puso en marcha en febrero para proteger los buques mercantes de los ataques hutíes. Es una misión puramente defensiva, autorizada a abrir fuego para salvaguardar los navíos o a ella misma.
Los rebeldes hutíes, que controlan la capital y amplias partes de Yemen, atacan desde hace meses los buques mercantes que consideran vinculados a Israel, en solidaridad con los palestinos de Gaza por la guerra estallada en octubre tras el ataque del movimiento islamista Hamás contra el sur del Estado hebreo.