El presidente ruso, Vladimir Putin, recibió garantías de que no será arrestado durante su próxima visita a Mongolia, a pesar de la orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos crímenes de guerra, según informaron dos personas familiarizadas con los preparativos del Kremlin.
La visita, programada para el 3 de septiembre, será la primera de Putin a un Estado miembro de la CPI desde que en marzo del año anterior se emitió la orden de arresto en su contra por el secuestro de niños en las zonas ocupadas de Ucrania. Como signataria del Estatuto de Roma, Mongolia estaría obligada a ejecutar la orden de arresto si Putin entrara en su territorio.
"No tenemos ese problema", declaró el viernes el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, cuando se le preguntó si Mongolia había proporcionado garantías de que no implementaría la orden de la CPI. Sin embargo, los funcionarios de la presidencia de Mongolia, así como de la oficina del primer ministro y del Ministerio de Asuntos Exteriores, no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
El motivo formal de la visita de Putin está vinculado a la conmemoración del 85º aniversario de las batallas de Khalkh Gol en 1939 contra las fuerzas japonesas. A pesar de la orden de arresto, Sergei Markov, un consultor político cercano al Kremlin, aseguró que "no existe ningún riesgo de arresto para Putin", destacando que antes de cualquier viaje al exterior, las negociaciones y garantías de seguridad son acordadas previamente con el país anfitrión.
Este viaje marca una excepción, ya que Putin ha evitado visitas a países miembros de la CPI desde que se emitió la orden de arresto. Por ejemplo, el año pasado no asistió a la cumbre de líderes del BRICS en Sudáfrica, país que también forma parte de la CPI, y optó por no asistir a la cumbre del G-20 en India, un país que no es miembro de la corte internacional.
Rusia, al igual que Estados Unidos, no es miembro de la CPI, que cuenta con 124 Estados miembros. La CPI ha subrayado que los Estados Partes en el Estatuto de Roma están obligados a cooperar con sus decisiones, incluidas las órdenes de arresto.
La visita de Putin también se enmarca en un contexto de creciente importancia de Mongolia como tercer país para facilitar el comercio entre Rusia y China, en medio de las amenazas de sanciones estadounidenses contra empresas chinas que comercian directamente con Rusia. Según Stanislav Belkovsky, un ex asesor político del Kremlin y ahora crítico del gobierno, "Putin viaja a Mongolia con garantías de seguridad chinas", lo que sugiere que Mongolia, a pesar de no querer confrontarse con Estados Unidos, no se opondrá a los intereses chinos.