La bolsa de Nueva York terminó al alza el viernes, impulsada por datos positivos de inflación en Estados Unidos y buenos resultados de empresas.
El Dow Jones ganó 0,55% para batir su récord de cierre, por cuarta vez esta semana, mientras que el tecnológico Nasdaq ganó 1,13% y el S&P 500 1,01%.
La bolsa de Nueva York tuvo una jornada volátil, típica de un fin de mes, con apertura en verde, momentos en negativo, y una subida de último momento.
"Los volúmenes fueron débiles hoy (viernes), lo cual es lógico antes de un fin de semana largo (el lunes será feriado en Estados Unidos). Pero había una tendencia alcista alentada por buenas noticias (de empresas) e indicadores positivos", resumió Patrick O'Hare, de Briefing.com.
La inflación se mantuvo estable en julio en Estados Unidos, en 2,5% en la medición a 12 meses, y crecen las perspectivas de que la Reserva Federal (Fed, banco central) recorte sus tasas de interés a mediados de setiembre.
"El dato de inflación (con el índice) preferido por la Fed es suficientemente cercano a 2%" anual, el objetivo del banco central, "como para que comience a recortar sus tasas" en septiembre, estimó Bill Adams, de Comerica Bank.
El escenario es, además, positivo para el mercado, ya que el consumo aumentó en general en junio.
"No es una economía en recesión", subraya Adams.
Wall Street recibió además buenos resultados de empresas.
El diseñador de microchips Marvell Technology (+9,16%), menos conocido que otros del sector, superó las proyecciones de resultados esperadas por el mercado, gracias al crecimiento de la inteligencia artificial (IA).
Dell (+4,33%) también presentó resultados superiores a las expectativas y aumentó sus previsiones anuales.
Nvidia repuntó 1,51%, y otros grandes del sector de la IA tuvieron viento a favor y cerraron al alza como Broadcom (+3,75%), AMD (+2,11%) o Qualcomm (+3,43%).
Intel se disparó 9,49%, impulsada por informaciones de la agencia Bloomberg, que señaló que el grupo considera dividir sus actividades de diseño de microprocesadores de sus operaciones de fabricación.
Aunque septiembre es tradicionalmente un mal mes para las acciones, podría no ser el caso este año, señaló Patrick O'Hare, de Briefing.com.
"En este momento el mercado toma las sesiones una a la vez, y ve una economía que sigue creciendo, resultados de empresas positivos y tasas (de interés) que bajarán", argumentó.