Bajo el lema "Educación para el bienestar", se realizó la 16° edición del CADE Educación, el foro educativo más reconocido en nuestro país que organiza IPAE Acción Empresarial. Uno de los ponentes de este evento fue José Dextre, ingeniero de profesión y fundador de la Universidad Científica del Sur (UCSUR) en 1998.
Precisamente, Dextre presentó hace pocos días una investigación sobre el bienestar de los estudiantes de cuarto y quinto de secundaria en San Juan de Lurigancho. En dicho documento, analiza la importancia del rol que tienen los colegios y los hogares en la creación de un entorno seguro y favorable para los menores. Para hablar sobre este tema y su experiencia como fundador de la Universidad Científica del Sur, La República conversó con él.
-Señor Dextre, usted cuenta con una investigación sobre el bienestar de los estudiantes en zonas de Lima como San Juan de Lurigancho. ¿Cuáles fueron sus motivaciones para llevar a cabo este estudio?
-Con un equipo de la Universidad Científica del Sur decidimos hacer una investigación sobre el bienestar estudiantil. Fuimos a seis centros educativos públicos de cuarto y quinto de secundaria, ubicados San Juan de Lurigancho, que de alguna manera refleja lo que sucede en una población mayoritaria de nuestra sociedad. Porque en nuestro país puedes ver casos de violencia en La Libertad, Puno, Huánuco y Lima, que concentra la tercera parte de la población.
Todo esto surgió de mi motivación como educador preocupado del tema de lograr una sociedad mejor y esa sociedad mejor, pasa por la educación que debería ser una política de largo plazo que se enfoque no solamente en darte conocimientos, sino en darte una formación para el bienestar que haga que tú actúes positivamente.
Si yo me preocupo en la política educativa. Es decir, solo buscar que los estudiantes aprendan más matemáticas, que obtengan capacidades de lectura y no me preocupo de una construcción de valores, lo que tengo es una sociedad como la nuestra, donde tú sales y la corrupción va desde el alcalde de cualquier pueblo hasta la Presidencia de la República y donde la violencia se expresa en los propios hogares
-¿Cuál fue la metodología empleada para esta investigación y qué hallazgos encontró?
-En San Juan de Lurigancho, uno de los distritos más poblados, entrevistamos a alrededor de 1.500 estudiantes, padres de familia, docentes y también a alumnos. Esa es más o menos la metodología que se ha seguido y lo que ha buscado la investigación es trabajar alrededor de tres variables: el logro de competencias socioemocionales, el sentido de comunidad y el apoyo social percibido por estos estudiantes.
Encontramos que la percepción de peligrosidad de la zona en la que viven los estudiantes es casi 46%, es decir, casi la mitad siente que vive en una zona insegura o muy insegura. Asimismo, el 27% nos dijo que su escuela es peligrosa y el 42% nos comenta que su comunidad es peligrosa. De igual forma, hallamos que casi el 60% ha sido víctima de violencia en la calle, el 32% en tuvo casos de violencia en su casa, el 39% en la escuela y el 41,64 % considera que ha sufrido de discriminación.
- ¿Cuál es la importancia de repensar el rol de la escuela y la propia casa en la que viven los estudiantes para que sean entornos seguros y favorables al bienestar de ellos?
-Tenemos que modificar el modelo de la gestión básica. Es decir, se tiene que trabajar con el colegio, con la manera cómo se dirige el colegio y con los padres. Por ejemplo, los medios de comunicación del Estado deberían apoyar con ese entrenamiento a los papás que quieren una mejor salud en sus hijos y el Ministerio de Educación debe propiciar la realización de talleres.
- Usted fue fundador de la Universidad Científica del Sur (UCSUR) en 1998. Cuénteme un poco más acerca de la historia de esta universidad y qué carreras tienen una mayor demanda…
-Vengo de una familia de educadores. En la época de la reforma educativa, mi padre estuvo comprometido con esta y desde este entonces, yo escuchaba de este tema en el comedor de mi casa. Como educador siempre estuve en la búsqueda de la excelencia en las instituciones, tanto en el instituto como la universidad.
Ahora, estamos entre las 100 primeras universidades del mundo en salud y bienestar. Somos líderes en sostenibilidad en el ranking y estamos entre las cuatro primeras en el último ranking de Sunedu. En Medicina Humana, Estomatología, Veterinaria y ahora Psicología tenemos una demanda alta. También, en derecho, artes escénicas tenemos una demanda alta y de la misma forma, hay carreras en gestión con protagonismo en ingeniería de sistemas, civil y ahora se está lanzando ingeniería en inteligencia artificial.
-Recientemente, la Universidad Científica del Sur se unió a la estrategia Aliado por la Educación de Pronabec para financiar los estudios de pregrado de 16 jóvenes egresados de la educación secundaria. Cuénteme más acerca de esta iniciativa...
-Tenemos convenio con Pronabec, La Marina, el Patronato de la Uni y tuvimos con la Municipalidad de Salvador. Es decir que la política de becas de la universidad forma parte de la responsabilidad social nuestra. Ahora, estamos diseñando un programa para que la maestría de educación o cursos de valores, que son algunos cursos de la maestría y el doctorado en Educación, nos permitan generar becas para los profesores de los colegios públicos. En síntesis, estamos diseñando cursos del desarrollo de valores en la formación educativa para los docentes.
-En los últimos 10 años, más de 15 ministros de Educación estuvieron encargados de este importante sector. ¿Cree que la inestabilidad política ha afectado negativamente los esfuerzos por mejorar el sistema educativo?
- Evidentemente, afecta. ¿Cuáles son los dos grandes hitos, si tú revisas los últimos 20 años? La evaluación meritocrática que se hace entre el 2006 y 2007, que sigue teniendo detractores, y tienes la reforma universitaria del 2014 donde se crea Sunedu. En el caso de la primera se le ataca desde un punto de vista economicista, donde los sindicatos defienden evidentemente el derecho del profesor. En el caso de la reforma y Sunedu, yo creo que lograron un éxito importante en establecer las condiciones básicas de calidad. Somos una universidad que busca ese equilibrio: tener lo académico y lo social y lo económico administrativo.