Un hombre previamente condenado por intento de feminicidio fue liberado de prisión solo para cometer el crimen que había intentado anteriormente. Pablo Catalán Guachaca, quien había sido condenado a ocho años de cárcel por intentar asesinar a su expareja, fue puesto en libertad en febrero de 2023.
Apenas unos meses después, el 17 de agosto, su expareja, Elena Ramos, fue encontrada sin vida en su vivienda en Lima, víctima de un asesinato. "Nosotros solo pedimos justicia, que se haga justicia por mi hermana", declaró Luis Ramos, hermano de la víctima, en un testimonio brindado a las cámaras de Latina Noticias.
Elena, una madre de cuatro hijos que había llegado a Lima desde Apurímac hace 20 años en busca de un futuro mejor, había decidido darle una oportunidad a Catalán. Según los familiares de la víctima, "No estamos recibiendo ningún apoyo, no hay ni la policía que ha hecho no de nadie estamos recibiendo apoyo, solamente estamos acá la familia, lo que pedimos es justicia que nos apoye la ministra de la Mujer que la investigación es que no quede impune". Pese a las denuncias y las súplicas de ayuda, Elena no pudo escapar del ciclo de violencia.
Este caso pone en evidencia las fallas del sistema judicial peruano, que permitió la liberación de un hombre con antecedentes de violencia de género sin un adecuado seguimiento posterior. Según el documento "Perú: Feminicidio y Violencia contra la Mujer, 2015-2023", el feminicidio sigue siendo un problema grave en el país, con una tasa de 0,9 feminicidios por cada 100,000 mujeres en 2023, manteniéndose constante en los últimos años.
La familia de Elena, devastada por su pérdida, ha hecho un llamado urgente a las autoridades para que se haga justicia y se capture a Pablo Catalán, quien actualmente se encuentra prófugo. "Estamos ante un asesino reincidente en el ataque a una mujer, y necesitamos que la justicia actúe para que este crimen no quede impune", declaró Luis Ramos, hermano de la víctima, durante un enlace en vivo con el canal de televisión Latina.
La liberación de Pablo Catalán, quien había sido condenado por intento de feminicidio, pone en tela de juicio la eficacia del sistema judicial peruano en la protección de las víctimas. Según el informe del INEI, la reincidencia en casos de violencia contra la mujer es un problema recurrente, exacerbado por la falta de seguimiento a los agresores liberados. En muchos casos, como el de Elena Ramos, la libertad de estos agresores resulta en la finalización del ciclo de violencia con el feminicidio de la víctima.
El caso de Elena Ramos es un reflejo de la alarmante situación de los feminicidios en Perú. En 2023, se registraron 146 casos de feminicidio, una cifra que se ha mantenido prácticamente constante desde 2019. Las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) muestran que Lima Metropolitana sigue siendo la región con el mayor número de casos, con 26 feminicidios registrados solo en ese año.
