El cantante Markos Rosero, hijo del popular Segundo Rosero, se abre camino en la música y acaba de lanzar su versión de 'Tomar para olvidar', del compositor peruano Manuel Mantilla. El joven intérprete quiere continuar el legado de su padre, quien lleva casi cinco décadas en la música y acaba de darle la bienvenida al mundo de la música.
"Nací con la música en mis venas, el legado continúa", ha señalado Markos Rosero, quien se crió en un ambiente musical y que ahora quiere brillar con luz propia, y conquistar al público latinoamericano. "Precisamente, 'Tomar para olvidar' ya suena en diversos países como Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia y en todas las plataformas digitales", ha dicho.
'"Tomar para olvidar' es una composición que aborda el dolor de los recuerdos y la necesidad de superarlos, a través de la música. Su profunda lírica y resonancia emocional han tocado a muchos, haciendo eco en corazones heridos que buscan consuelo", agregó sobre la composición de Mantilla.
El cantante ha usado su cuenta de Instagram para referirse a su hijo. "Amigos queridos les invito a que escuchen el primer sencillo de mi hijo Markos Rosero, 'Tomar para olvidar'. Ya está disponible en todas las plataformas digitales", escribió.
Y a inicios de año, en entrevista con La República habló, precisamente, sobre su heredero musical. "Mi hijo ya tiene 18 años, estaba estudiando en la universidad y ya se graduó de bachiller. Está estudiando música y producción porque dice que quiere seguir los pasos del papá. Más que ayudando, le estoy orientando. Si es que quiere seguir en este difícil mundo del escenario, de la música, tiene que hacerlo gradita por gradita. No va a pensar que por ser hijo de Segundo Rosero ya se va a hacer famoso. Si quiere ser un artista de buen nivel, tiene que aprender y entregarse al público, lo tienes que hacer bien, algo bueno, no mediocre. Artistas de media gama hay por millones, pero artistas de éxito, hay pocos", dijo.
Segundo Rosero, es un músico, director y productor artístico, que en 1978, grabó su primer disco. Musicalmente es identificado como uno de los gestores de un género popular denominado Rockola, que tiene su base en el pasillo y creadoramente se funde con el bolero,el vals, la zamba para mostrarse como un nuevo género musical. "Literariamente expresa el desarraigo del terruño, el amor y desamor, la traición y el olvido y no deja de tocar realidades humanas que te causan dolor cuando te habla del valor de la vida frente a la idea de que ésta tiene un final inevitable", se lee en su biografía.