En un nuevo intento de controlar la información durante la campaña electoral, el gobierno de Nicolás Maduro bloqueó los portales web El Estímulo, Medianálisis, Runrunes, Analítica y TalCual. La orden, emitida por Conatel, suma estos medios a la lista de páginas censuradas desde el 4 de julio, alcanzando un total de doce sitios bloqueados según la organización VE sin Filtro. Esta ONG, dedicada a monitorear las restricciones de internet en Venezuela, ha señalado un incremento en las medidas autoritarias para silenciar a la prensa independiente.
La operadora Digitel se unió a Cantv y NetUno al bloquear Runrunes, una medida que refleja la coordinación entre diversas empresas de telecomunicaciones para ejecutar las órdenes gubernamentales. Otros portales afectados desde principios de julio incluyen Cazadores de Fake News, EsPaja, Observatorio Venezolano de Fake News, Instituto Prensa y Sociedad de Venezuela (IPYS Venezuela), Espacio Público y Proton VPN.
El bloqueo de los medios en Venezuela se ha realizado de manera sistemática y sin previo aviso. Según informes, las operadoras Cantv, Digitel, Movistar, Inter y NetUno recibieron instrucciones para restringir el acceso a ciertos portales. Estas medidas forman parte de una estrategia más amplia para controlar el flujo de información durante el período electoral, impidiendo que los ciudadanos accedan a contenido independiente y crítico del gobierno de Nicolás Maduro.
Las restricciones comenzaron a intensificarse desde el 4 de julio, coincidiendo con el inicio de la campaña electoral. Organizaciones como VE sin Filtro han registrado hasta doce medios bloqueados, una cifra que destaca la magnitud de la censura. La operadora Digitel, por ejemplo, sumó a Runrunes a su lista de bloqueos, un medio que ya estaba restringido por Cantv y NetUno desde 2020. Esta coordinación entre diversas operadoras de internet evidencia un esfuerzo concertado para limitar el acceso a información crítica.
El gobierno de Venezuela, a través de sus representantes, ha justificado estos bloqueos como medidas necesarias para combatir la desinformación y proteger la estabilidad del país. Sin embargo, estas acciones han sido ampliamente criticadas por organizaciones defensoras de la libertad de expresión y derechos humanos. Jorge Rodríguez, jefe de la campaña de Nicolás Maduro, alegó que su jefe político sufre un "blackout informativo" a pesar de la constante presencia mediática del presidente.
Las declaraciones de Rodríguez sugieren una narrativa gubernamental que acusa a los medios independientes de manipular la información. Sin embargo, figuras como Víctor Amaya, editor de TalCual, han denunciado estas acciones como intentos autoritarios para silenciar a la prensa libre. Amaya, a través de sus redes sociales, invitó a los lectores a seguir las noticias del diario a través de plataformas alternativas como redes sociales y aplicaciones de noticias sin filtro.
En los últimos meses, el gobierno de Nicolás Maduro ha intensificado el bloqueo de medios independientes en Venezuela. Además de los más recientes bloqueos de El Estímulo, Medianálisis, Runrunes, Analítica y TalCual, otros portales ya habían sido censurados previamente. Entre estos se encuentran Cazadores de Fake News, EsPaja, Observatorio Venezolano de Fake News, Instituto Prensa y Sociedad de Venezuela (IPYS Venezuela), y Espacio Público.
Estas acciones se enmarcan en un contexto de creciente autoritarismo, donde la libertad de prensa se ve gravemente amenazada. Organizaciones como Espacio Público calculan que 60 de los 100 medios más importantes en Venezuela han sido bloqueados, formando parte del aparato de hegemonía comunicacional del gobierno. Este control sobre la información no solo afecta a los medios grandes, sino también a aquellos dedicados a desentrañar las manipulaciones informativas del régimen.
