Después de la pérdida de un ser querido, es natural experimentar un profundo sentimiento de tristeza. En ese contexto, tras el fallecimiento de una persona que poseía bienes, es necesario iniciar el proceso de repartición de dichos bienes y cumplir con los últimos deseos del difunto. Sin embargo, surgen dudas cuando el titular de los bienes fallece y no existe un testamento previo que especifique la distribución de los mismos o la existencia de herederos.
En tales circunstancias, es fundamental recurrir a la normativa legal correspondiente para determinar el procedimiento a seguir y garantizar una correcta resolución de la situación. Por ello, en esta nota te comentamos todo sobre este tema y evitar futuras complicaciones. ¡Toma nota!
Si algún familiar directo ha fallecido y de por medio no existe un testamento es importante precisar que la ley establece un mecanismo donde se puede ejecutar para resolver esta problemática, se trata de la sucesión intestada el cual es un mecanismo establecido por la ley para designar a los herederos legales de aquellas personas que han fallecido sin dejar un testamento válido.
Este proceso se lleva a cabo ante un notario público o un juez de paz letrado, en el lugar donde residía la persona fallecida. Es importante tener en cuenta que la sucesión intestada se activa en casos donde no existe un testamento válido o si el testamento ha sido declarado nulo, inválido o caduco. Es fundamental seguir este procedimiento para resolver la problemática de la herencia en caso de fallecimiento de un familiar directo.
La normativa establece que los hijos, nietos y demás descendientes, los padres, abuelos y demás ascendientes, así como el cónyuge o, en su caso, el integrante sobreviviente de la unión de hecho, se convierten en herederos forzosos tras el fallecimiento del causante. Por otro lado, otros parientes consanguíneos, como hermanos, tíos y sobrinos, son considerados herederos legales con derecho a la herencia en ausencia de los primeros. Es importante tener en cuenta que la ley otorga protección a ciertos familiares cercanos, garantizando su participación en la sucesión del patrimonio del fallecido.
El trámite de sucesión intestada puede iniciarse en la vía notarial o judicial, cumpliendo los requisitos correspondientes. Si se opta por solicitarla por vía notarial, el ingreso a la Sunarp puede llevarse a cabo de forma presencial o virtual a través de nuestra plataforma digital SID-Sunarp. Es importante seguir los pasos adecuados y completar la documentación necesaria para garantizar un proceso eficiente y correcto en la gestión de la sucesión.
El proceso para solicitar la anotación preventiva de la sucesión intestada en la Sunarp es fundamental. El notario, encargado de llevar a cabo este trámite, tiene la responsabilidad de asegurarse de que todo se realice de acuerdo con la normativa vigente.
En primer lugar, el notario debe solicitar dicha anotación preventiva, la cual tiene un costo de S/. 20.00. Posteriormente, procederá a declarar herederos a aquellos que hayan acreditado su vínculo con el causante, para lo cual extenderá un acta notarial detallada y precisa.
Una vez completados estos pasos, el notario deberá solicitar la inscripción definitiva de la sucesión intestada en la Sunarp. Es importante tener en cuenta que este proceso también conlleva un costo, en este caso de 20.00 soles, para la calificación e inscripción en los Registros Públicos.
Es relevante mencionar que los costos notariales pueden variar dependiendo de la notaría en la que se realice el trámite. Por lo tanto, es fundamental estar informado sobre los costos específicos en cada caso particular.
