A 25 metros bajo tierra, se encuentra el banco que desde 100 años custodia más de medio millón de lingotes de oro pertenecientes a diferentes gobiernos y entidades internacionales.
Este búnker es uno de los lugares más seguros y misteriosos del mundo. Situado en el centro financiero de América, este banco guarda alrededor de 507.000 lingotes de oro en una bóveda subterránea, propiedad de varios países. Esta impresionante colección dorada, con un valor estimado cercano a los 250 mil millones de dólares, no pertenece al propio banco, sino a diversos gobiernos extranjeros, bancos centrales y organizaciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Desde su construcción entre 1921 y 1924, esta bóveda fue un bastión de seguridad y confianza. Excavada directamente en la roca subyacente de una isla, puede soportar el inmenso peso del oro gracias a su cimentación sobre el lecho de roca. Este búnker, además de ser un ícono de seguridad financiera, se ha convertido en un destino fascinante para aquellos interesados en las curiosidades y secretos del mundo financiero.
La bóveda del Banco de la Reserva Federal de Nueva York es la mayor reserva de oro del mundo. Este búnker, situado a dos calles de Wall Street, en Estados Unidos, alberga más de medio millón de lingotes de oro distribuidos en pilas que alcanzan hasta los tres metros de altura. Gran parte del oro llegó durante y después de la Segunda Guerra Mundial, cuando muchos países, preocupados por la seguridad de sus reservas, decidieron depositarlas en este lugar seguro.
El diseño y construcción de la bóveda hace 100 años fueron realizados con la máxima precisión. La bóveda se encuentra a 25 metros por debajo de Liberty Street, en el sótano del edificio principal de la Reserva Federal. Esta ubicación permite una estabilidad estructural sin igual, y aprovecha el lecho de roca de Manhattan para soportar el enorme peso del metal precioso.
La seguridad en la bóveda del Banco de la Reserva Federal de Nueva York es extrema. La entrada está protegida por un cilindro de acero de 90 toneladas, que se alinea con un marco de acero y hormigón de 140 toneladas para formar un cierre hermético. Además, el recinto dispone de un sistema de vigilancia y seguridad las 24 horas, con monitoreo por cámaras y sensores de movimiento.
El proceso para mover los lingotes dentro de la bóveda es riguroso. Cada movimiento requiere la presencia de un equipo de control formado por tres personas. Este equipo debe estar presente para cualquier actividad, incluso para tareas simples como cambiar una bombilla, para garantizar la máxima seguridad. Los lingotes se transportan en ascensor desde el nivel de la calle hasta el sótano, donde son cuidadosamente pesados e inspeccionados para verificar su autenticidad y calidad.
Muchos países decidieron enviar sus reservas de oro a la bóveda del Banco de la Reserva Federal de Nueva York durante y después de la Segunda Guerra Mundial. Entre los principales países que almacenan su oro en esta bóveda se encuentran Alemania, Italia, Francia y Rusia, entre otros. Estos países, preocupados por la seguridad de sus reservas, vieron en ese búnker un lugar seguro para almacenar su riqueza.
Estados Unidos, con sus 8.134 toneladas de oro, es el país con la mayor reserva del mundo, seguido por Alemania e Italia, con 3.364 y 2.452 toneladas, respectivamente. La bóveda de Nueva York alberga una cuarta parte de las reservas mundiales de oro. Su acceso está restringido exclusivamente a gobiernos y organismos internacionales.
Los países con las mayores reservas de oro en el mundo, según los datos más recientes:
