El 80% de las familias de esta nación de Sudamérica tienen al menos un animal en casa, lo que ha impulsado una creciente economía alrededor del cuidado y bienestar de las mascotas.
El amor por los animales de acompañamiento ha crecido exponencialmente en los últimos años, convirtiéndose en una tendencia mundial. Estudios recientes de la empresa GFK han mostrado un aumento en la tenencia de mascotas en diferentes países, reflejando cambios culturales y económicos significativos. En este contexto, los países de Sudamérica destacan por su alta proporción de hogares con mascotas.
Uno de los fenómenos más sorprendentes es la adopción de animales durante la pandemia de Covid-19. Las restricciones de movilidad y la necesidad de compañía impulsaron a muchas familias a incorporar un nuevo miembro peludo en sus hogares. Este aumento en la tenencia de mascotas no solo ha tenido implicaciones sociales, sino también económicas, con un notable crecimiento en el mercado de productos y servicios para mascotas.
Argentina se ha posicionado como el país con mayor tenencia de mascotas en el mundo. De acuerdo con diversas encuestas y estudios, como la de la empresa GFK, aproximadamente el 80% de las familias argentinas tienen al menos un animal en casa. Esta cifra supera con creces a otros países de la región y del mundo. En el desglose de preferencias, los perros son los más populares, presentes en el 81% de los hogares con mascotas, seguidos por los gatos con un 52%.
La cuarentena fue un factor clave en el incremento de adopciones. Tres de cada diez familias argentinas adoptaron uno o más animales durante este periodo. Para muchos, sacar a pasear a su perro fue la única oportunidad de salir a la calle durante las restricciones más estrictas. Este fenómeno no solo alivió la soledad de las personas, sino que también destacó la importancia de las mascotas en la vida cotidiana.
El aumento en la tenencia de mascotas ha impulsado significativamente la economía relacionada con su cuidado. En Argentina, los pet shops se han multiplicado, ofreciendo una amplia gama de productos que van desde alimentos balanceados hasta ropa y accesorios de diseño. La oferta incluye desde camas y juguetes hasta sofisticados abrigos para perros, especialmente diseñados para razas como los galgos.
Además, los cafés y restaurantes se han adaptado para ser pet-friendly, permitiendo que los clientes disfruten de sus bebidas en compañía de sus animales. Estos establecimientos han creado espacios específicos para que las mascotas también se sientan cómodas, lo que refleja una creciente tendencia de inclusión de los animales en la vida social de sus dueños.
El pet setting es otro servicio en auge. Los cuidadores a domicilio visitan a las mascotas, les proporcionan alimentos, juegan con ellas y, en algunos casos, les administran medicamentos. Este servicio es especialmente útil para los dueños que viajan con frecuencia, asegurando que sus mascotas reciban el cuidado necesario mientras están fuera.
