Los audífonos de chupón, también conocidos como intraurales, se han vuelto muy populares en la tecnología debido a su capacidad para proporcionar un sonido de alta calidad y su diseño ergonómico que se adapta cómodamente al oído; además de su precio económico. Sin embargo, su uso prolongado y a altos volúmenes puede conllevar serios riesgos para la salud auditiva. Diversos estudios han señalado que estos dispositivos pueden causar daños irreversibles si no se utilizan de la manera correcta.
Además de los problemas auditivos, estos dispositivos pueden generar otros problemas infecciosos. En ese sentido, presentaremos un artículo redactado por Infosalus, un medio especializado en medicina, sobre los problemas que generan estos populares aparatos electrónicos en los jóvenes y las repercusiones que tendrán en el futuro; asimismo, se mencionarán los auriculares recomendados para el uso diario.
El principal problema con los audífonos de chupón es su capacidad para aislar el ruido exterior, lo que a menudo lleva a los usuarios a subir el volumen más de lo recomendable. Según el artículo de Infosalus, escuchar música a volúmenes altos durante periodos prolongados puede causar pérdida auditiva permanente. Esto se debe a que los sonidos fuertes dañan las células ciliadas en el oído interno, las cuales no se regeneran, conforme a lo mencionado por María José Lavilla, especialista en otorrinolaringología.
Además, el uso prolongado de audífonos de chupón puede causar fatiga auditiva, un fenómeno en el que la capacidad auditiva disminuye temporalmente después de la exposición a sonidos fuertes. Si bien esta condición es reversible, su repetición frecuente puede conducir a una pérdida auditiva permanente. Asimismo, los síntomas iniciales de daño auditivo incluyen zumbidos en los oídos, dificultad para escuchar conversaciones en ambientes ruidosos y la necesidad de subir el volumen de dispositivos electrónicos.
Otro factor a considerar es la presión ejercida por los audífonos de chupón dentro del canal auditivo. Esta presión puede causar incomodidad y dolor, especialmente si se usan durante muchas horas al día. Por otro lado, la falta de ventilación adecuada también puede provocar infecciones y acumulación de cerumen, lo que puede afectar aún más la audición y causar molestias adicionales.
Para evitar los riesgos asociados con los audífonos de chupón, la especialista recomienda optar por auriculares de diadema o los denominados supraaurales. Estos auriculares, que se colocan sobre las orejas en lugar de dentro del canal auditivo, permiten una mejor ventilación y reducen la presión en los oídos. Además, su diseño abierto permite una percepción más natural del sonido ambiental, lo que ayuda a evitar la tentación de subir el volumen excesivamente.
Otra opción recomendable son los auriculares con cancelación activa de ruido. Estos dispositivos utilizan tecnología avanzada para reducir el ruido ambiental, lo que permite escuchar música o atender llamadas a volúmenes más bajos sin comprometer la calidad del sonido. Aunque suelen ser más costosos que los audífonos de chupón, los beneficios para la salud auditiva justifican la inversión.
Es crucial también prestar atención a los hábitos de uso de cualquier tipo de auriculares. Diversos especialistas recomiendan seguir la regla 60/60, que consiste en escuchar música a no más del 60% del volumen máximo durante no más de 60 minutos continuos. También es importante hacer pausas regulares para permitir que los oídos descansen y evitar la exposición continua a sonidos fuertes.