El presidente argentino, el ultraliberal de extrema derecha, Javier Milei, no para de hacerse enemigos en el mundo, y ahora aprovechó para insultar a dos países y sus respectivos presidentes en una misma publicación en su cuenta de la red social X.
«Se come la curva en el caso Bolivia y me critica por no declarar de modo inmediato», empezó diciendo Milei a las 7:07 horas de este martes 2 de julio. «Se conoce el fraude montado en Bolivia y el perfecto idiota, en lugar de aceptar su error me critica por dejar su estupidez a la vista», agregó. Y con «perfecto idiota» se refiere al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.
«Luego de las agresiones de Lula (en especial su fuerte interferencia en la campaña electoral y apoyo sólido a la campaña más sucia de la historia) se queja porque le respondo con verdad (ha estado preso por corrupción y es comunista)», prosiguió.
Pero no dejó la vara ahí, y decidió levantarla mucho más: «Así son estos idiotas exaltadores de las formas por carecer de contenido y que además son esclavos del sobre, lo cual los hace ser funcionales a los gobiernos corruptos».
«Si hubiéramos hecho las cosas como éste gran dinosaurio idiota decía, LLA hubiera perdido. No le hicimos caso y ganamos y como no puede asimilar su error, entonces ensucia desde el armado de una crítica políticamente correcta. Son parte del fracaso argentino. VLLC!!!», concluyó Milei.
Estas aseveraciones acaban de provocar que el presidente boliviano, Luis Arce, llame a consultas a su embajador en Argentina, Ramiro Tapia, ya que considera que las aseveraciones son «inamistosas y temerarias», y denunció que conforma «un negacionismo inaceptable». A su vez, la ministra y portavoz de la presidencia, María Nela Prada, convocó al representante diplomático argentino, Marcelo Massoni.
Milei mantiene un enfrentamiento ideológico muy fuerte con Lula da Silva, por estas en antípodas políticas, y ha decidido anteponer su propia ideología a los intereses de Argentina y de la región al confirmar que no asistirá a la próxima cumbre del Mercosur, el 8 de julio próximo, con tal de no cruzarse con Lula.
En lugar de eso, viajará a Brasil para participar de un encuentro de grupos ultraderechistas, neofascistas y religiosos convocados por su amigo, el expresidente Jair Bolsonaro. El evento ha sido llamado Conferencia de Acción Política Conservadora, CPAC, en la ciudad balnearia de Camboriú, imitando el nombre de los eventos que convoca el Partido Republicano en los Estados Unios.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, dijo ayer que “por cuestiones de agenda no va a ir a la cumbre del Mercosur, como tenía previsto días atrás”, para evitar “una sobrecarga en la agenda”.
Será su primera visita a Brasil, pero no oficial porque nunca ha conversado con Lula, ni siquiera por la vía telefónica, y ahora hace lo posible para evitar encontrárselo en persona en instancias como las del Mercosur.
Aparte de Bolsonaro, va a estar el hijo de este, Eduardo Bolsonaro, y otros líderes de extrema derecha de la región como el actor mexicano Eduardo Verásategui, o el excandidato presidencial José María Kast.
Este tipo de eventos ya le son habituales a Milei: estuvo en un CPAC en Estados Unidos y fue un orador principal en la conferencia de Vox en España. En este último evento ocasionó un grave conflicto diplomatico con España al acusar de corrupción a Pedro Sánchez y su esposa, Begoña Sánchez.
