Luka Doncic lleva sin jugar desde el día de Navidad. Una distensión en el muslo izquierdo le ha hecho perderse 27 partidos esta temporada, más de la mitad de los de su equipo, y cuando su reaparición con los Dallas Mavericks estaba prevista para la próxima semana, antes del All-Star, ha llegado el anuncio de su traspaso a Los Angeles Lakers. Más allá del movimiento que ha provocado un terremoto sin precedentes en la Liga estadounidense, el futuro de Doncic no se ve alterado simplemente en lo deportivo.
El balcánico se encuentra en su séptima temporada en la NBA y tenía todavía dos años más de contrato con los Mavericks. La relación terminaba en la temporada 2026/2027, pero este mismo verano Doncic ya podía firmar un nuevo contrato con la franquicia texana. El problema para Doncic es que Mark Cuban, su gran valedor, ya no es el propietario de los Mavs. Desde hace poco más de un año, la propiedad de la franquicia ha pasado a manos de la familia Adelson, dueños de una cadena de casinos en Las Vegas. Y los Adelson han decidido reconstruir a los Mavs sin el que fuera canterano del Real Madrid. Todo apuntaba que el próximo verano, Doncic iba a firmar el contrato más elevado en la historia de las grandes ligas estadounidenses. Eso suponía casi 350 millones de dólares anuales. El esloveno comenzaría cobrando en torno a 60 "kilos" por temporada y acabaría rozando los 80 con lo que se convertiría en el jugador mejor pagado de la historia. Y eso que ahora en los Mavs estaba 43 millones esta temporada y 46 la siguiente.
Pero esas cifras se quedan pequeñas con el nuevo convenio colectivo que el sindicato de la NBA firmó en 2023 y que incluye un nuevo concepto denominado "Supermax", el "Súper contrato". Esta modalidad de contrato incluye una serie de cláusulas que benefician a las consideradas megaestrellas de la Liga. Con varios años en la NBA, si eres All-Star, estás incluido en los mejores quintetos cada curso, brillas en determinadas estadísticas... aporta una serie de variables que disparan el contrato correspondiente a cifras nunca vistas antes. El problema para Doncic es que con el traspaso a los Lakers deberá esperar para firmar el nuevo contrato y no lo podrá ratificar este próximo verano. A Doncic le quedaban dos años más de contrato con los Mavericks, el último, en la 2026-27, con una opción para el jugador en la que ganaría 48 millones. Entonces deberá esperar al verano de 2027, cuando tenga 28 años, para firmar el nuevo contrato.
Los especialistas en Estados Unidos apuntan que Doncic debería firmar una extensión de su contrato por tres años con los Lakers dejándose una opción de jugador para la temporada 2028-29. Sería la única forma de recuperar parte del dinero que no va a ganar si hubiera continuado en los Mavericks. Con este movimiento, Doncic podría embolsarse en la temporada 2028-2029 72 millones de dólares. Esa cifra sí que cuadraría con el contrato "Supermax" que ya no va a firmar con los Mavs.
