La Seguridad Social ya anunció a finales del pasado año cuál sería la subida prevista para los 10,3 millones de pensiones contributivas en España de cara a este 2025: las pensiones contributivas se revalorizarán este año un 2,8% con carácter general, de acuerdo con el Índice de Precios de Consumo (IPC) medio interanual. Esto supondrá un aumento de unos 600 euros anuales para todas aquellas personas con una pensión media de jubilación.
Estos nuevos cambios en materia fiscal no sólo provocarán un incremento en los tramos de ingresos de las pensiones de jubilación, ya que también afectarán a la declaración anual que los pensionistas tendrán que realizar este año 2025. Al igual que los salarios, estas pensiones contributivas de jubilación están clasificadas como rendimientos del trabajo, lo que hace que también estén sometidas a la retención del IRPF.
La nueva normativa fiscal aprobada de cara a este año 2025, hará que millones de jubilados en España se vean afectados por una serie de cambios significativos relacionados con sus pensiones contributivas. En función de cuál sea la cantidad de dinero que cobran por su pensión, los jubilados tendrán que abonar a la Seguridad Social una cantidad correspondiente a su tasa de retención de IRPF.
En España no existe un porcentaje único de retención de IRPF, sino un sistema escalonado que incrementa la carga fiscal a medida que aumentan los ingresos que reciben los ciudadanos por sus pensiones contributivas. Este sistema hace que, cuanto mayor sea la cantidad de dinero que reciben los jubilados por su pensión, mayor será también el porcentaje de retención de aplicado a la misma. De cara a este año 2025, las tasas de retención del IRPF serán las siguientes:
A pesar de que la gran mayoría de las pensiones contributivas en España están sujetas a las retenciones de IRPF, algunos pensionistas están exentos de tener que pagar este impuesto. Estas son las pensiones que no tienen aplicado este tipo de retención en nuestro país:
Desde la Seguridad Social también han establecido un límite máximo para las pensiones de jubilación en España de cara a 2025. La revalorización prevista para este año hace que la pensión máxima de jubilación supere los valores del IPC interanual. La cantidad aprobada será de 3.267,60 euros mensuales, sin tener en cuenta las pagas extraordinarias que pudieran corresponder, y cuya cuantía está afectada, también, por el citado límite. Esto supone que los pensionistas en España podrán llegar a cobrar una pensión máxima de 45.746,40 euros anuales.