La fundación NEOS, que preside Mayor Oreja, ha dado a conocer este viernes el informe que el grupo de trabajo sobre "Amenazas Globales" de la fundación ha realizado sobre la crisis migratoria. Bajo el título "inmigración en España: buenismo o eficacia", Jorge Soley, Alejandro Macarrón, Luis Zayas, Fernando Rosado y Carlos Beltramo, destacan la importancia de adoptar un enfoque estratégico y responsable hacia la inmigración en España. Ponen su énfasis en la necesidad de llevar a cabo reformas significativas en la legislación de extranjería, asilo y nacionalidad, así como en las políticas de integración, para asegurar el bienestar social y la cohesión en la comunidad. También, advierten de que "una gestión adecuada de la inmigración es crucial para el futuro de la sociedad de acogida y los inmigrantes mismos".
Se trata de un informe "profundo y riguroso", según explicó Mayor Oreja, donde todos ellos han abogado por un pacto de Estado en materia de inmigración. El texto será también remitido a los diferentes partidos políticos que siguen sin llegar a un acuerdo sobre la reforma de la Ley de Extranjería mientras el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, clama por una solución ante una isla que sigue desbordada por la incesante llegada de cayucos.
Según explicó Mayor Oreja este informe se atreve a señalar lo que también afirma la Doctrina Social de la Iglesia y muchos obispos africanos, "el derecho que tienen las personas que viven en otro continente, a no tener que emigrar". Al mismo tiempo, ha advertido de que "debe haber límites que rijan las políticas de extranjería de los países receptores" e insta al Gobierno y a los medios de comunicación a actuar desde la defensa de la verdad, por encima de intereses partidistas.
Entre los grandes retos que tiene España, indicó el exministro del Interior, está el de acertar con las políticas migratorias algo que será "clave y decisivo" ya que, el desacierto "puede ser letal" para nuestra civilización en Europa y en España "mucho más que en EE UU por la proximidad" que tenemos de África, afirmó.
El problema de la inmigración se está abordando desde "posturas muy polarizadas" por lo que el informe presentado por NEOS trata de buscar "los matices". "No queremos quedarnos solo ahí sino llegar a conclusiones" y esperan que España aprenda de los "errores de nuestros vecinos" donde, por ejemplo, en Francia es un fenómeno que no cesa.
Huyen de la visión extendida de que las personas son "fichas intercambiables" ya que consideran que cada persona porta en sí una serie de conocimientos, cultura, habilidades, algo que han tenido en cuenta en este análisis. Y es que, ante el debate del reparto de menores extranjeros no acompañados -menas- por las comunidades autónomas avisan de que "repartir el problema no es solucionarlo, la solución es repatriar a esos menores, que han hecho un recorrido y han pagado a las mafias. El efecto llamada es clarísimo".
En muchos países europeos, incluida España, se observa un desorden migratorio debido a su masividad y sus efectos en la sostenibilidad del estado del bienestar y la seguridad pública, donde son persistentes las entradas ilegales y las estancias irregulares de extranjeros, por lo que subrayan el "abuso del sistema de asilo y el crecimiento de problemas de integración socio cultural".
En un momento en el que la inmigración se ha convertido en uno de los principales problemas para los españoles, según reflejan las últimas encuestas del CIS, el informe subraya cómo la población de origen extranjero ascendía el 1 de octubre del año 2024 a 9.193.988 personas, que junto a los más de 2.000.000 de niños nacidos en España de padres extranjeros lo que representa ya más del 22% de la población total. Este incremento, apuntan, "exige una reforma del modelo para adecuar los flujos migratorios a una ratio de absorción e integración de las diferentes comunidades llegadas, en particular de aquellas con menos afinidad cultural y religiosa". Por ello inciden en la importancia de abandonar la gestión migratoria pasiva, tolerante con la irregularidad, y el recurso a las regularizaciones extraordinarias, y apostar por una "política activa y estratégica que equilibre la inmigración regular y seleccionada". Esto, destacan, permitirá "asegurar el futuro de la nación y la cohesión de la comunidad política, así como reducir el desempleo a niveles comparables con el resto de Europa".
Según refleja en trabajo, el coste de la inmigración para el Estado español se estima en más de 30.000 millones de euros anuales y genera una fuerte presión en los servicios públicos y en el mercado laboral. Además, tratan de desmontar la idea falaz de que la inmigración es vista como el remedio a la baja natalidad de los españoles. Aseguran que, aunque pueda aliviar temporalmente déficits demográficos o laborales, "esta solución no aborda el problema de fondo y puede generar desequilibrios culturales y sociales".
Por ello, el Grupo de Trabajo de Amenazas Globales de NEOS apuesta por implementar reformas significativas en la legislación de extranjería, asilo y nacionalidad, así como en las políticas de integración, para garantizar el bienestar social y la cohesión social. Aseguran que no se trata de un dilema simplista sobre inmigración sí o no, sino de una "gestión adecuada de la inmigración".
Entre las principales medidas por las que apuestan están: Llevar a cabo una inmigración regular y controlada. Para ello recomiendan una política nacional "coherente", eliminando regularizaciones extraordinarias y revisando criterios de arraigo.
Ven necesario aumentar el tiempo de residencia para obtener la nacionalidad, y para ello proponen establecer por ejemplo requisitos de renta para residencias prolongadas y límite a las reunificaciones familiares a niveles sostenibles.
Inciden también en realizar un ajuste de flujos migratorios mediante la reducción de la inmigración neta ajustando los requisitos laborales y ampliando la contratación en origen para cubrir sectores deficitarios.
Otro de los puntos clave que valoran en el informe es dar un apoyo a la integración mediante la creación de un programa nacional de formación educativa y laboral, adaptado a las necesidades del mercado, e incremento del apoyo escolar para jóvenes inmigrantes.
Para prevenir la inmigración ilegal piden que se lleve a cabo un refuerzo de las fronteras mediante acuerdos con los países de origen, control marítimo y lucha contra mafias.
También consideran imprescindible que se mejore el sistema de asilo "optimizando los procesos para evitar abusos y dar prioridad a casos realmente necesitados".
En cuanto al control y depuración de datos de inmigrantes apuesta por implementar las recomendaciones para mejorar los controles de padrón, matrimonios de conveniencia y el fraude en solicitudes de ayudas.
Desde NEOS abogan también por una repatriación y expulsión efectivas mediante propuestas para extender la capacidad de estancia en centros de internamiento hasta el límite permitido por la normativa europea, reforzar los Tribunales Superiores de Justicia para agilizar los recursos y reformar la ley de extranjería para permitir la expulsión de delincuentes reincidentes o con penas superiores a un año.
