El BBVA ha decidido modificar la OPA lanzada sobre el Banco Sabadell para reducir las condiciones establecidas para que se pueda considerar que su propuesta ha sido aceptada por los accionistas de la entidad catalana. Su nueva estrategia se basa en un ajuste técnico con el que pretende dificultar los movimientos de Sabadell en contra de la operación mediante la recompra de acciones propias. Según ha detallado el BBVA a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), esta modificación "implica un trato más favorable para sus destinatarios" y consiste en que, si en un principio debía ser aceptada por el 50,01% del capital, ahora debe serlo por un número de acciones que permitan al BBVA adquirir al menos más de la mitad de los derechos de voto efectivos del Banco Sabadell. Según el porcentaje de autocartera actual que posee la entidad con sede en Alicante, el porcentaje de aceptación bajaría al 49,3%.
En concreto, BBVA ha modificado la condición de aceptación mínima de la OPA que pretendía alcanzar el 50,01% del capital social, de modo que ahora está condicionada a alcanzar "más de la mitad de los derechos de voto efectivo", lo que excluye la autocartera de Banco Sabadell en el momento en el que termine el plazo de aceptación de la oferta. Se trata de una "minoración" de la condición de aceptación mínima, que implica "un trato más favorable" para los accionistas de Sabadell, ha explicado en su comunicación la entidad que preside Carlos Torres, pese a que los derechos de voto de la autocartera están suspendidos, según lo dispuesto en el artículo 148.a) de la Ley de Sociedades de Capital.
En las condiciones del lanzamiento inicial de la OPA se especificaba que la aceptación mínima era de 2.720.654.746 acciones del Sabadell -ese l 50,01% del capital social-, sin especificar si se cuenta a quienes tienen derecho de voto y a quienes no, siendo este último el caso de las acciones en autocartera. Ahora, esta condición cambia a petición de BBVA para que se excluya la autocartera y se tengan en cuenta solo los derechos de voto efectivos del Sabadell al término del plazo de aceptación, asegurándose así el control del banco. Teniendo en cuenta que el capital de Sabadell está representado por 5.440 millones de acciones, de las que 78,7 millones las tiene la propia entidad en autocartera, la oferta se entenderá cumplida si es aceptada por, al menos, 2.680 millones de acciones de Sabadell, que representarían la mitad más uno de los derechos de voto efectivos de Banco Sabadell en ese momento".
En el supuesto de que al término del periodo de aceptación hubiese variado la autocartera de Banco de Sabadell, la aceptación mínima se cumplirá si la oferta fuera aceptada por el número de acciones necesario para adquirir más del 50% de los derechos de voto efectivos en ese momento. En caso de que la opa prospere, BBVA amortizará las acciones de Sabadell en autocartera al término del plazo de aceptación en la primera Junta General de Accionistas del banco presidido por Josep Oliu que se celebre, reduciendo el capital social e inmovilizando entretanto dichas acciones. El cumplimiento de esta condición de aceptación mínima evitará que el banco tenga que formular una OPA obligatoria -según marca la ley vigente-, en la medida en que la oferta habría sido aceptada por acciones que representan, al menos, el 50% de los derechos de voto efectivos a los que esta se hubiera dirigido.
El resto de términos de la OPA se mantienen sin cambios.
