Miguel Ángel Gallardo, el presidente socialista de la Diputación de Badajoz, declaró también por primera vez ante la instructora como imputado en el «caso David Sánchez».
Como él mismo admitió, es el «máximo responsable de la institución a nivel político» y, por tanto, ostenta entre sus responsabilidades la «jefatura superior de todo el personal» que en el organismo provincial trabaja.
Durante su comparecencia negó que supiese cuando el músico desembarcó en la Diputación pacense que fuese el hermano del entonces líder nacional de su formación política, el PSOE. «Nadie le dijo» que David Sánchez Pérez-Castejón mantenía una relación fraternal con el secretario general de Ferraz y ahora presidente del Gobierno. Conoció esta circunstancia, defendió, justo «antes de que fuese nombrado» en el cargo en mayo de 2017.
Gallardo aseguró que conoce al hermano de Pedro Sánchez «desde que está» en la institución que él preside y que con anterior tenían «cero» relación de ningún tipo.
Al serle planteada una de las grandes incógnitas, de quién partió la idea de crear el nuevo puesto de coordinador de actividades de los conservatorios, que acabó ocupando David Sánchez, el presidente reveló que «cree» que fue Cristina Núñez, la diputada responsable del área de Cultura y Deporte, quien «se lo mencionó» por primera vez en una reunión para «valorar los presupuestos» celebrada entre el 10 y el 11 de octubre de 2016.
De igual forma, que se pidió a los directores de los dos conservatorios, el profesional y el superior, que indicasen las funciones a las que se podría dedicar. Ellos mismos así lo refirieron en su testifical de este pasado miércoles.
La relación a lo largo de los casi ocho años que lleva David «Azagra», como se le conoce en el mundo musical, vinculado profesionalmente a la Diputación, aseguró Gallardo que no fue nunca directamente y puso como ejemplo que «nunca ha comido» con él y que cada año lo ve, estimó, unas «tres veces».
Sí, en cambio, como presidente provincial gestionó y celebró reuniones con varios ministerios del Gobierno de su hermano para abordar la financiación del proyecto Ópera Joven que David Sánchez dirigiría «con fondos europeos».
En lo relativo a la Oficina de Artes Escénicas que dirige desde que se transformó su puesto en octubre de 2022, Gallardo se abonó a la versión de que constituyó únicamente «un cambio de denominación» de sus responsabilidades labores.
Esta es la idea en la que se ha insistido desde el seno de la Diputación para justificar que no mediase concurso público. Expuso que «lo único» que también «cambió» fue que se «eliminó la incompatibilidad» que tenía hasta entonces entre sus condiciones como alto cargo. «Seguí el tema de los cambios», admitió en su interrogatorio.
Las fuentes conocedoras de la causa trasladan a este diario que «puso por las nubes» lo que ha supuesto la instauración de esta oficina que encabeza el hermano del jefe del Ejecutivo, sobre todo destacó que constituyó un paso importante para la «democratización cultural».
